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EL SALTO, Jal., 2 de octubre de 2024.- El Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia en El Salto tiene nueva presidenta. Se trata de Monserrat Arroyo Farías, quien innovará en su administración, dado que el organismo contará con una dirección dedicada al cuidado animal.
“Desde el DIF les brindaremos protección y, en algunos casos, buscaremos una mejor vida para ellos”, mencionó.
En compañía de autoridades federales, estatales, municipales, ciudadanos, amigos y familiares, Arroyo Farías rindió protesta y en el acto destacó la presencia de la Diputada Local, Itzul Barrera, Valeria Ávila diputa local y Maye Villa de Lemus, ex presidenta del Sistema DIF Guadalajara.
La nueva titular de la dependencia expresó su gratitud a los presentes por la confianza depositada para tan importante labor, que tendrá retos pero también oportunidades de mejorar y de que los recursos sean destinados a las familias saltenses que más lo necesitan.
También comentó que las familias son el pilar de nuestra sociedad y agradeció a su madre por la educación sólida que recibió de ella. “Gracias, mamá. Tu sabiduría y capacidad para entender y apoyar a los demás han sido una guía constante para mí, y hoy, al asumir esta nueva responsabilidad, lo hago con la firmeza de tus enseñanzas”.
Añadió que el DIF debe ser la institución que ofrezca ayuda a las familias que están pasando por un momento difícil, como los adultos mayores, niños, discapacitados y familias que luchan por salir adelante.
Indicó que su administración será cercana a la ciudadanía, buscará la integración y la resiliencia, sobre todo en temas de salud, educación y alimentación. Invitó a los presentes a colaborar, ya que cada pequeño esfuerzo cuenta.
“Los recursos son limitados, pero la voluntad, pasión, corazón y amor por los ciudadanos son enormes, ¡¡y serán las capacidades que nos ayuden a apuntalar la transformación en la integración de las familias saltenses”.
Se comprometió a que el trato a la ciudadanía será con transparencia, confianza, respeto y empatía. “Vamos a responder a la necesidad con acciones, no con palabras o simulaciones, demostrando que el compromiso real se mide en los resultados que podemos ofrecer a nuestra gente”.