¡¡¡Plop!!!/Salvador Echeagaray

DIARIO, UN DIARIO

– ¡Hola estimado lector, una pregunta! ¿lleva usted un diario? –

– ¿Se refiere al gasto del día o, al diario, como le decíamos al periódico? –

– No; a un apunte de su vida, quizá al final del día, donde escriba lo que hizo en la jornada.

– No. ¡No tengo tiempo para eso!

Y si se fija, la mayoría de las personas no llevan, -o no llevamos Kimosabi- un diario. Esas memorias de nuestra vida, que el día de mañana nos harán nuestras delicias.

Y, ¡Qué importante es escribir un diario! Mas que nunca, con la vorágine de sucesos que vivimos en esta hipermodernidad o. era digital, nos debería ser más fácil llevar nuestro diario.

Pero, aún así con tantos teclados que disponemos dejamos de lado el escribir sobre nosotros. No mas revise cuántos mensajes manda diario por WhatsApp. Si los guardara, en menos de un año, podría hasta publicar un libro de 500 páginas.

Así que, no debería ser tan difícil llevar nuestro diario. Solo es cuestión de hacernos el hábito. Tal vez, antes de dormir sería bueno escribir y reflexionar sobre lo que hicimos en el día. También, preguntarnos si aprovechamos el tiempo; si corregimos tal o cual defecto, si arreglamos la gotera de lavabo que lleva dos años chorreando.

El apunte “diario del diario” (valga la rebuznancia) es tan bien necesario para reflexionar. Es una forma de meditación que tanto recomiendan los asesores motivacionales (coaches) y que siempre, los místicos nos han aconsejado. Así, reflexionamos sobre si lo que hicimos, o dejamos de hacer, estuvo bien o mal o, si hay que mejorar algunas cosas.

Pero, por lo que más me gusta escribir el diario es por ser una autobiografía que deja uno sobre sí mismo y, que puede, releerse. Es el libro de nuestro vivir, de nuestras reflexiones, de nuestro aprendizaje y, de la huella que dejamos, en este devenir que se llama vida.

Grandes personajes han llevado diarios de sus vidas. Es innumerable mencionarlos, pero, aunque no aspiremos a la fama o al reconocimiento, vale la pena dedicarnos unos minutos a escribir sobre nosotros mismos.

–          ¿De qué escribiste hoy? –

–          De la importancia de llevar un diario. –

–          ¡Ah! ¿Son esos cuadernos que tienes de soltero donde escribías sobre tus amigotas? –

¡¡¡PLOP!!!

El autor es director del Departamento de Filosofía de la UAG.