¡¡¡Plop!!!/Salvador Echeagaray
La respuesta de Loret
Una de las características más definidas del estilo personal de gobernar del presidente López Obrador, es defenderse siempre de críticas, cuestionamientos u observaciones, con una tenacidad digna de mejores causas. Su manejo es el mismo, repetido hasta la saciedad, repetición con variedad, un principio elemental de la propaganda política. Ya en otra entrega hemos hablado de la devoción del primer mandatario a los principios que hicieron de Joseph Goebbels el forjador de la propaganda nazi. «Una mentira repetida miles de veces se convierte en verdad» decía el formador de la imagen de Adolfo Hitler.
La repetición es incesante, los recursos los mismos. Al presidente lo que más le importa es su propia imagen. Así que echa mano de los mismos clichés, «yo tengo otros datos», es un ataque de nuestros adversarios», etc. etc. Ya usted sabe todas las desviaciones que ha hecho el presidente, quién, desde su propia óptica es prácticamente impecable, inmaculado, sin errores, omnipotente, omnisapiente y hasta omnipresente. Es decir, es tan perfecto como Dios.
Este miércoles el presidente se le fue con todo al periodista Carlos Loret de Mola, siempre incómodo para López Obrador, desde que era parte de Televisa. El ataque tuvo que ver con el montaje, que hace 16 años, ocurrió en torno al caso de Florence Cassez. El mismo día, el comunicador respondió al primer mandatario, destacando que el ataque en su contra se debe a que le es incómodo del Primer mandatario, por temas como el video de Pío López Obrador, el hermano presidencial; la denuncia en contra de Felipa Obrador, prima de Andrés Manuel; el señalamiento de los apoyos de 130 millones para el gran propagandista del régimen, Epigmenio Ibarra, o las casas de Manuel Bartlett.
Loret señaló también el asunto de la vacuna no aplicada como tema de la molestia presidencial para entablar una embestida en su contra. Para Loret esta fue una representación exacta del estilo de Gobierno del presidente. «ante cualquier dificultad, cualquier error o acción indebida, el interés primordial no es responder a la inquietud de sus gobernados, sino buscar desesperadamente a quien culpar»…
Hasta aquí los argumentos de Carlos Loret de Mola. El problema que destaca el periodista es que, de nueva cuenta, en vez de responder a cuestionamientos, el presidente decide atacar, devaluar y denostar a quien le critica. El mismo discurso neo nazi, sustentado en Goebbels y sus principios. Este otro pontifica: crear cortinas de humo para desviar la atención, en lugar de reconocer, o al menos de responder a las críticas y a los cuestionamientos.
Estamos ante un caso tremendo de megalomanía, de narcisismo que se acerca a niveles patológicos. El presidente es muy inteligente, pero usa esta facultad para defenderse, casi siempre, con éxito, porque su discurso sigue teniendo una enorme aceptación social y fundamentos de propaganda que han mostrado su eficiencia desde hace casi un siglo. En este escenario hay varias opciones…
a) El tema es de credibilidad, López Obrador, al demeritar a Loret, va a desacreditar a este comunicador entre sus correligionarios y simpatizantes, con el agravante de que este periodista, reiteradamente, ha sido cuestionado en su integridad.
b) En este mismo tema, la credibilidad del presidente será cuestionada por Loret, y al contrario, erosionará al Primer Mandatario entre quienes están en su contra. Es decir que en el escenario de la división de México el tema servirá para polarizar más
c) El presidente se comprometió hoy a no hacer montajes en su gobierno, refiriéndose al caso Cassez. Habría que preguntar al Gobierno federal, a riesgo de otras respuestas iguales, si el asunto del avión o el de las vacunas que no son vacunas no han sido montajes del Gobierno
d) La problemática del país es mucho más importante que el envío de cortinas de humo. Solamente la pandemia y la crisis merecerían más atención en los shows de la mañana que los ataques del presidente a quienes considera que le atacan…
e) El problema para el presidente de estos temas que señala Loret, como el video de Pío, los contratos de su prima, los premios a Epigmenio o las casas de Bartlett, es que le roban la agenda al presidente. La investigación periodística está siendo demasiado incómoda, como sucede casi siempre, al poder establecido…