Balón en la Red/César Huerta

La pretemporada ya comenzó y Chivas no tiene refuerzos. Hay sólo una cara nueva en el plantel de Víctor Manuel Vucetich, pero se trata de un regreso: el joven delantero César Huerta está de vuelta, luego de pasar un año fuera del club. Millones de aficionados esperan con ansia la contratación de nombres importantes. Pero la difícil situación económica que vive este futbol de pandemia dice que no.

Entonces surgen las preguntas: ¿Ya está totalmente cerrada la esperanza de refuerzos? ¿A qué puede aspirar el plantel rojiblanco si no tiene mayores incorporaciones? ¿Qué se le puede exigir al técnico si este grupo él no lo diseñó? ¿Será otro torneo más viendo de lejos la pelea por el título del futbol mexicano?

Vamos por partes. Al no existir presupuesto para hacer compras millonarias, como ocurrió al principio de 2020 (35 millones de dólares), la posibilidad se reduce prácticamente a la obtención de algún intercambio. José Juan Vázquez ya fue colocado en el Toluca y hasta ahora no se ha anunciado nadie que venga a Chivas como parte de la operación.

Aún queda la opción de acomodar a Javier Eduardo López y Alexis Peña. Por salir del equipo en medio de un escándalo de indisciplina y porque su costo en el mercado no es demasiado elevado, se puede prever que aun cuando se lograra un intercambio por ellos, tampoco se trataría de un refuerzo “bomba”. Al menos no en nombre.

¿Qué va a pasar si no llega ningún refuerzo? Lo cómodo para cualquier entrenador sería pedir que no se le exijan resultados con un plantel que no diseñó y al que no le trajeron los dos o tres refuerzos que solicitó. Para fortuna de Chivas, Víctor Manuel Vucetich no es conocido por poner pretextos de esa índole, como suele ocurrir con algunos otros estrategas.

Con los meses de trabajo que tuvo, el llamado Rey Midas logró adentrarse en el conocimiento del plantel lo suficiente para llegar a Semifinales del Guardianes 2020. La exigencia que se hace el propio cuerpo técnico es superar dicha instancia. Es decir, en la mente del entrenador está el llegar a la Final. El problema vendrá cuando sea notorio que al equipo le faltan armas.

Sobre todo en un puesto clave para Vucetich: los volantes interiores. Los dos de mayor creatividad que tenía ya no forman parte del plantel: Chofis López y Dieter N, despedido luego de que se levantara una denuncia en su contra por presunta violación. El técnico ha improvisado ahí con Isaac Brizuela, Jesús Ricardo Angulo y hasta Cristian Chicote Calderón, en el último partido del torneo.

Pidió jugadores naturales en dicho puesto, pero simplemente los refuerzos no llegan. La situación económica es complicada, a pesar de que Chivas es uno de los clubes que mayores ingresos genera. Aunque se diera el escenario de enfrentar el siguiente torneo sin contrataciones, el Rebaño Sagrado no puede olvidar algo: es un equipo grande en el que no caben los pretextos. Con o sin incorporaciones, en el Guadalajara del título para abajo, es fracaso.