Nace la Ciudad de México; desaparece el Distrito Federal

CIUDAD DE MÉXICO., 30 de enero de 2016.- Este viernes 29 murió el Distrito Federal, la capital de México desde 1824.

El DF, la Ciudad de los Palacios, la ciudad que fue sacudida en 1985 por dos terremotos que la desnudaron, la capital donde el Presidente tiene su residencia oficial, Los Pinos; la que tiene los museos más importantes, la que tuvo el primer gobierno de izquierda, ahora será llamada Ciudad de México.

Sobre las ruinas de la antigua Tenochtitlán se erigió la capital de la Nueva España, y pasada la guerra de independencia, la Constitución de 1824 la convirtió en la capital del nuevo país y el naciente Congreso mexicano decidió que se convirtiera asimismo en el Distrito Federal, para albergar las sedes de los poderes jurídico, legislativo y ejecutivo.

En 1928, durante el gobierno de Álvaro Obregón, se eliminó el régimen municipal y se facultó al Presidente para nombrar al Jefe del Departamento del Distrito Federal.

En 1970 se dividió al DF en 16 delegaciones, en 1987 se creó la Asamblea de Representantes del DF y en 1993 asumió nuevas facultades en materia legislativa, como ratificar el nombramiento del Jefe del DF.

En 1994 se publicó el Estatuto de Gobierno del DF que rige la distribución de competencias entre los ámbitos local y federal, además de regular las relaciones entre los poderes de la Unión y los órganos locales de gobierno.

En 1997 los habitantes del DF eligieron por voto directo al primer Jefe de Gobierno del Distrito Federal, al ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano.

Los ex jefes de gobierno, Andrés Manuel López Obrador y después Marcelo Ebrard Casaubón anhelaron la Reforma Política que transformará al DF en la Ciudad de México, en la entidad federativa 32 y otorgarle autonomía en todo lo concerniente a su régimen interior y a su organización política y administrativa.

Pero no lo consiguieron. El jefe de Gobierno actual, Miguel Ángel Mancera Espinosa retomó la bandera y parecía destinado a tener la misma suerte.

Empero, había una diferencia: la Reforma Política era el compromiso 91 del Pacto por México, acuerdo firmado por las diferentes fuerzas políticas al inicio de la administración encabezada por Enrique Peña Nieto.

El proceso se estrelló en 2014 e incluso el comisionado para la Reforma Política designado por Mancera, Porfirio Muñoz Ledo, llegó a decir en 2015 que para entonces la Reforma parecía casi imposible.

Pero ese casi hizo la diferencia y fue aprobada por el Congreso de la Unión a fines del mismo año y al tratarse de una Reforma Constitucional aprobada por 17 estados a inicios de enero, el Congreso hizo la declaratoria el 20 de enero, con lo que sólo bastaba la firma de Peña Nieto del decreto promulgatorio para que culminara el proyecto tan anhelado.

Ayer fue el día. Peña Nieto firmó el proyecto a las 13:30 horas de este 29 de enero, en un evento que él mismo calificó de histórico y un triunfo de los habitantes de la capital.

Adiós Distrito Federal y bienvenida Ciudad de México, agregó un feliz Mancera.

Oficialmente, será a partir de este 30 de enero cuando entre en vigor el decreto promulgatorio y comenzará el proceso para que la capital, la Ciudad de México tenga su propia Constitución.

Así, por llegar a los dos centenarios, el DF se despide de sus casi 9 millones de habitantes. Descanse en paz.