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GUADALAJARA, JAL., 5 de mayo de 2019.- Por que el arte siempre tiene que sorprender, a Trotsky Vengarán le gusta hacerlo mezclando lo áspero del punk rock con cierta poesía, aunque se considera una banda de rock directo y su máxima preocupación es empatizar con las personas, victimas e injusticias, no sólo denunciar los abusos.
En charla en su paso por CDMX y previo a una convivencia con seguidores en Pasagüero este lunes, el combo uruguayo dio voz a sus ideales con tono fuerte y seguro, porque «nos concentramos en comunicar, transmitir el universo de las sensaciones y somos hijos de una cultura musical de Montevideo».
Si bien crea punk rock, no sólo toca para punk rockers, sino para todo el mundo; hace música popular en clave punk rock. La premisa es que sea abierta, está cómodo en la escena y aprovecha lo que se da, pero siente que es más que un género musical.
«Las bandas de punk rock uruguayo siempre se distinguieron por una poesía muy elevada y muy distinta al punk rock argentino (influencia directa del género) y es de ahí de donde nosotros nos tenemos que destacar.
En Uruguay somos una banda de rock directo y no nos importa por qué te gusta nuestra música, aquí estamos», sentenció Guillermo Peluffo, voz.
Explosión Sentados en una mesa mientras se refrescaban con una cerveza, le tocó a Hugo Díaz, el otro integrante en la charla, responder y recordó el momento en que les empezó a ir bien: fue en la década de los dos mil, cuando ya tenían 10 años en los que les había ido muy mal.
En ese momento «explotamos, como el rock uruguayo, junto con una generación donde está La Vela Puerca, No te Va a Gustar y El Cuarteto de Nos. Eso nos dio la posibilidad de participar en muchos festivales en Uruguay.
«Nosotros agarrábamos el recital arriba y dejábamos al público enloquecido. Como no éramos de las bandas principales, tocábamos en horarios ideales, donde la gente ya estaba caliente, pero no cansada», detalló.
La explosión del rock en Uruguay, añadió, coincidió con una crisis económica muy fuerte y desaparecieron los sellos internacionales, se acabó su trabajo en la radio, con lo que querían difundir, fue un estado de anarquía total y el público empezó a valor más a los artistas locales.
«Y de repente cuando los medios, las radios, cuando todavía eran importantes, masivos, como ahora las redes sociales, les empezó a pasar a los artistas nacionales y fue ahí cuando se dieron cuenta que no necesitaban músicos internacionales para hacer un festival para ciento 50 mil personas y lo hicieron sólo con propuestas locales», rememoró el guitarrista.
Detrás del arco La agrupación, que busca tocar en sus conciertos, además de sus clásicos, canciones nuevas, «porque nuestro miedo es convertirnos en un homenaje a Trotsky», explicó por qué su música se liga con un deporte.
«El futbol es una parte muy importante de nuestras vidas, somos sudamericanos, muy pasionales y nos parece que no hay por qué escaparle a ese costado de la vida, uno no es menos cool por hablar de futbol en sus canciones, ni lo buscas ni lo esquivas, se cuela», externó Hugo Díaz.
En sus visitas a México ha sido una constante sus descargas sonoras para la barra Monumental del Club América, porque «hay una cultura de la canción de tribuna que a nosotros nos gusta mucho y es un gran honor que hinchadas de futbol de otros países incorporen canciones de Trotsky».
En su recorrido por México, Trotsky Vengarán tocó en Estado de México, CDMX, Guadalajara y este sábado, ya en EU, en Miami, con su nuevo disco, Los Valientes, bajo el brazo.