En Lección para Canallas, Diana Bovio se convierte en una estafadora

GUADALAJARA, Jal., 15 de junio de 2022.- Marisela llegó a su vida por medio de un casting que fue un poco tropezado y lleno de improvisaciones, que le puso desde el inicio grandes retos de convertirse en algo que nunca había hecho: estafar. 

En entrevista exclusiva para Quadratín Jalisco, Diana Bovio habla sobre su participación en Lección para Canallas que llegará a los cines el 1 de septiembre. 

¿Cómo es tu personaje de Marisela?

Es un personaje muy diferente a lo que he hecho. Me encanta que tiene una oscuridad ahí y muy presente, que es un personaje con más malicia, yo creo que todos las tenemos, pero Marisela la usa de una manera muy desfachatada. Creo que es una mujer muy encantadora, una mujer muy manipuladora que ha aprendido a ganarse la vida justo haciendo eso, aprovechándose de la gente y fue muy divertido hacerlo. Creo que conecté con un lado mío que creo que no lo tengo muy presente, pero lo disfruté mucho. 

¿Cómo llegó este personaje a ti? 

A través de un casting. Llegué a la castinera a conocer a Gustavo Moheno (director), a Ángel que es el guionista y fue muy chistoso porque llegué con las escenas del personaje de Jenny (hija de Barry el Sucio) porque en mi agencia cometieron el error de mandarme esas escenas y a mí se me hacía raro porque decía: ‘ella está muy chiquita, ¿por qué me están mandando a mí?’. Entonces pasó en el casting que más bien fue una improvisación, me dieron las escenas de Marisela ahí mismo y cómo que las leí un poquito y después empezamos a improvisar sobre el tema de cada una de las escenas. Me encantó que me dieran el personaje, un proceso padre en el que aprendí mucho. 

¿Empiezas desde el inicio con un reto? 

Sí, justo. Fue un personaje muy retador y llegar al casting y decir fuck estas no son las escenas y tiene que sacar el colmillo, todo lo que has aprendido y Gustavo le gustó y yo me divertí mucho. 

¿Es la primera vez que trabajas con Gustavo?  

Sí, es la primera vez.

¿Cómo fue tu experiencia? 

Siempre es muy interesante conocer a directores que son nuevos para ti, estas nuevas experiencias. Aprendí mucho sobre todo de mis compañeros, lo disfruté y fue una etapa en la que tuve muchísimo trabajo, fue como el primer año de mi carrera en el que trabajé sin parar. Los proyectos se hilaron uno con otro. Hubo un día que tuve llamado de día en la Ciudad de México y llamado de noche en Puerto Vallarta, entonces fue 24 horas sin dormir, trabajar, pero lo agradezco, aprendí mucho. 

¿Cómo fue trabajar con Joaquín Cosío? 

Lo máximo, yo tenía mucho nervio, tenía mucha emoción de conocer a Joaquín. Era un reto grande también estar a su nivel. No dejarme intimidar, no dejarme llevar por los nervios y le verdad es un gran compañero, es muy generoso. Sí es una persona genial. Fue muy padre, le aprendí mucho y lo disfruté también. 

¿Si pudieras describir la película de una manera muy sencilla cómo lo harías? 

¡Híjole! Diría que es una película que habla de cómo a veces podemos justificar la malicia de la gente, cómo podemos justificar la propia malicia y volvernos encantadores y hacerle creer a los demás de que lo que estamos haciendo está bien. 

Les diría que es una película muy divertida que me van a ver en un personaje que sí los va a hacer reír y ojalá los encante, pero con un tono y una personalidad y una sensualidad muy distinta a la que me han visto antes. No se la pierdan, vayan a verla. 

Diana Bovio cerrará el año con varios proyectos en cine de los que aún no pudo dar avances, pero estará en Ciudad de México haciendo teatro con Una anoche de reyes.