El combinado galo se enfrenta a los rusos tras su victoria ante Holanda (3-2) en el Amsterdam Arena el pasado 25 de marzo, en la que un gol de Blaise Matuidi a tres minutos del final acabó por plasmar la superioridad de Francia.
La última lista de Deschamps refleja que aunque algunos jugadores tienen prácticamente asegurado su lugar el próximo junio, todavía quedan plazas disponibles.
De momento, sin Karim Benzema, imputado por supuesta complicidad en un chantaje con un vídeo sexual al también internacional Matthieu Valbuena, y sin este último, víctima colateral en la selección, el delantero del Atlético de Madrid Antoine Griezmann es en este momento el nuevo jefe de filas, como le califica “Le Figaro”
En el encuentro de mañana se espera que vuelva como titular Mamadou Sakho, y no está claro todavía si Deschamps va a confiar en Olivier Giroud o si se decantará por André-Pierre Gignac.
El partido es también simbólico porque supone la vuelta de los “Bleus” a Saint Denis tras los atentados yihadistas de mediados de noviembre justo cuando jugaban contra Alemania.
“Vivimos momentos dramáticos, pero el Stade de France es nuestro estadio. Vamos para jugar un partido y para que la fiesta sea lo más bonita posible”, indicó esta semana el seleccionador en conferencia de prensa.
El presidente de la Federación Francesa de Fútbol, Noël Le Graët, destacó que se esperan para ese amistoso unas 65.000 personas, y garantizó que la seguridad en ese recinto “va a ser verdaderamente ejemplar”.
Francia se ha mostrado fuerte en casa en esta fase de preparación para su Euro. Desde que cedió ante Brasil en marzo de 2015 y ante Bélgica en junio del mismo año, en los últimos ha superado a todos los visitantes, la última la propia Alemania.
Los rusos, que no han perdido en sus dos últimas visitas a París y que no caen ante Francia desde 1998 -en Moscú- se han tomado muy en serio el partido de este martes, en el que esperan demostrar su valía y con ello encarar su participación en la Eurocopa con más moral si cabe.
Tras derrotar el sábado a la débil Lituania sin mayores dificultades (3-0), el seleccionador ruso, Leonid Slutski, pondrá probablemente en liza al equipo que debutará ante Inglaterra en la Eurocopa.
Volverá Akinféev a la portería, al igual que Dzyuba, el jugador de moda en Rusia y que es indiscutible en punta tras su magnífica temporada en el Zenit.
También parecen seguros Glushakov delante de la defensa y Shátov, mientras tienen muchas opciones de ser titulares el cerebro del CSKA, Alán Dzagóev, y el veterano Shirókov.
No se puede decir lo mismo de Kokorin, que era el jugador preferido del anterior seleccionador, Fabio Capello, pero que ha pegado un gran bajón en el último año.
En caso de que no convenza a Slutski, éste podría optar por jugar con el fino Samédov como interior o añadir un centrocampista de brega, al estilo de Denísov.
Los rusos tiene un grato recuerdo del Stade de France, ya que fueron los eslavos los que propinaron a los galos su primera derrota en ese estadio.
Fue en 1999 durante la fase de clasificación para la Eurocopa de Bélgica y Holanda y los rusos ganaron por 2-3 con dos goles de Panov y uno, el de la victoria, de Valeri Karpin.
Alineaciones probables:
Francia: Lloris; Evra, Sakho, Varane, Sagna; Matuidi, Diarra, Pogba; Griezmann, Giroud y Martial.
Rusia: Akinféev; Kombárov, Ignashévich, V. Berezutsky, Smólnikov; Glushakov, Shátov, Shirókov, Dzagóev; Kokorin o Samédov y Dzyuba.
