Antonio Contreras, nuevo técnico de Chivas Femenil
Nacido en Acatlán de Juárez, Jalisco, Noé Zárate Ojeda es una de las figuras históricas de las Chivas con quienes conquistó el título de la campaña Verano 97 de la mano del estratega brasileño, Ricardo Ferretti, permaneciendo por 10 años ininterrumpidos con la casaca rojiblanca. Después de su salida del Rebaño, se va al Atlante para más tarde, recalar en los Tigres que dirigía justamente, el Tuca Ferretti.
Previo a la llegada a Zuazua, Zárate regresa a Chivas y fue ahí que el entonces técnico Óscar Ruggeri, le cerró la posibilidad de jugar, por lo cual le dolió salir de una forma injusta.
¿Cómo saliste de Chivas?
Salí muy lastimado de Guadalajara, te soy sincero, no por la afición o el equipo, por la directiva. Llegó a Tigres y me tratan excelente, tratan a mi familia muy bien. Regreso de Atlante, llegó y está Ruggeri, llegó y está jugando Israel López y Chava Carmona, me fui un año y regresé: descendí a Atlante y regresé, al principio éramos los Súper Potros y después los Súper Potrillos, pero regresó y estaba el señor Ruggeri, y no veía que jugara, y le digo:’ oiga ¿no voy a jugar?’. ‘No, no te tengo contemplado’. ‘Bueno, pero deme la chanza’.
Fui a su vestidor y me dijo que no iba a jugar, no me dijo por qué. Cuando mucho me llevaba en ese entonces se me hace que había Libertadores y veías que la vasca la mandaban a Venezuela a jugar la Pre-Pre-Pre y un día me dice Tuca, en un Tigres contra Chivas: ‘¿Cómo estás, Noé?’ ‘¿por qué no juegas?’. Le dije: ‘no, pues este señor, así y así’. ‘¿Cómo?’, y ya me dice: ‘no te preocupes, deja que termine el torneo y te voy a traer’, y así quedó, terminando el Torneo: Noé Zárate a Tigres.
En una entrevista, hasta mi esposa la grabó, le preguntan a Tuca por los refuerzos. Oiga ¿y por qué se trajo a Noé Zárate? ¿Qué le llamó la atención de él? y le dice: ‘lo traje porque es mi hijo, y qué’, eso te lo ganas, no solamente dentro de la cancha sino fuera de ella. Yo sé que el Tuca siempre ha tenido una gran estima hacia mí. Pero vuelvo a lo mismo: uno como futbolista cree que el futbol va a ser para siempre y uno no entiende que el futbolista va a durar cierta época, ciertos años. Y lo que no entendemos, es que el futbolista se va a ir, pero la persona se va a quedar y cuando te vean fuera del futbol, ahí vas a entender en realidad, quien está a tu lado.
A mí me han llegado tantas cosas que te llenan de satisfacción, más allá de los títulos. Una vez una señora, yo ya dirigiendo al Colegio Subiré, niñas vs niñas, se acerca una señora: ‘Noé, que gusto saludarte, quiero darte las gracias’, ella era del otro Colegio y le digo: ¿de qué, señora, discúlpeme, pero no la conozco’, y me dice: ‘no, no me conoces, pero yo sí te conozco a ti. Es que tú un día sacaste a mi hija en la foto del estadio. Yo tengo el video’, y le pregunto: ‘¿cuál es su hija’’, no, una niña de 15 años, ya y me sentí como que me salieron más canas. Me dijo: ‘uno de tus compañeros me dijo que él la sacaba a la foto, pero al momento que ustedes salieron por el gusano, el que me dijo que iba a sacar a mi hija, no la sacó y se fue hacia media acancha, tú eras el último, viste llorar a mi hija y me dijiste: ¿qué le pasa, señora? ‘es que la iban a sacar a la foto y no se la llevaron’. ‘´¡Ah, échemela!’, dice que me la llevé y se sacó la foto con todo el equipo.
Esas satisfacciones de que esta señora me diera las gracias 15 años después, o 10 años después, lo que tú quieras, esas son las cosas que valen la pena. Esas son las cosas por las que dices: valió la pena haber jugado futbol, los campeonatos sí, que padre, pero pues ahí están las copas encerradas, se empolvan y al fierro viejo, pero la persona es lo que queda.
Yo estoy muy agradecido con Chivas, con la afición y todo lo que viví con Chivas, pero la forma en que nos trataron en Tigres a mi familia y a mí, estuve dos años y medio en Tigres y nos trataron… Mi familia desde que llegan al estadio, la suben al palco, le suben la cena, estacionamiento especial para ellos. Los días de cumpleaños para mis hijos, mi esposa. Esos detalles, me refiero a la directiva como tal, son los que dices: ‘en Tigres estaba bien a gusto’, en Tigres gané menos que en Guadalajara, por una situación que viví con los últimos directivos, ya no con el señor Martínez Garza, con él fue una relación muy personal, de amistad, en cuánto a la relación de patrón. A raíz de que dejó delegado el equipo a sus hijos fue otra cosa.
Tu etapa de Selección, cuéntanos rápidamente, ¿qué se siente el ser llamado?
“Pues yo creo que fue eso, rápidamente (risas). Ese viaje a Arabia, compartí con Zaguinho, porque nos subimos a los camellos en Arabia, Cuauhtémoc (Blanco), Claudio (Suárez), ya los conocía, pero de repente te encuentras en el ascensor con Romario, Ronaldo la Bestia. Era un salón muy grande: la mesa de Brasil allá, la mesa de nosotros aquí, comíamos en un mismo lugar y ahí veías a todos, fue una experiencia muy padre. Fue una de las satisfacciones y sueños cumplidos para todo futbolista, aunque en esa Confederaciones nos fue de la patada, nos fue muy mal, el haber tenido la experiencia. Yo cuando fui a Arabia, no salía de mi pueblo, de Acatlán, de repente me fui a Arabia, te soy sincero, no voy a regresar, cuando estaba en Arabia, 20-24 horas de viaje dije: ‘no, esto está al otro lado del mundo ¿a dónde fuimos? ¿A Arabia o a la luna?’. Pero son las experiencias bonitas que te quedan en el futbol, el haber conocido, no solamente a compañeros que te soy sincero y es a lo mejor uno de mis defectos fuera: soy muy introvertido, tímido, entonces a veces de repente: ‘oye, tú casi nunca sales en las cámaras’ y yo: ‘no, entrevisten a Camilo (Romero) a él sí le gustan.
Y te topas con Jorge Campos, Cuauhtémoc Blanco…
Jorge Campos en el Atlante, imagínate. Uno cuando ve el futbol desde esta ventana dice: ‘disciplina’, y ves a Jorge Campos y así es. Él así es, de repente en Atlante: ’Félix, ponte a porterear, ya me cansé’, y ya se pone y todo: ‘ya, quítate, voy yo’. Era tanta su capacidad, tan natural su forma de ser que te divertías con él, no te enojabas porque no entrenaba, al contrario, te reías de como él tomaba el futbol, y tú decías, para salir de dónde él salió, con todo respeto, para llegar a ser la figura que fue, tienes que llegar a tener una personalidad muy fuerte, un carácter muy bien definido y él lo tenía. Y no me refiero en ser desordenado, sino en saber qué es lo que quería, dónde estaba parado y para él el futbol era diversión y tú lo ves ahorita en la tele ya para él la tele es diversión, él es así, se mostraba así. Quieras o no, uno se pone máscaras: una para los partidos, los aficionados y la verdadera máscara te la pones con tu familia y ese tipo de jugadores no, nunca traen máscara, así son. Te puede caer gordo, te puede caer bien, pero así son. Coincidir con ese tipo de personas te hace crecer.
Tienes un negocio que emprendiste hace poco ¿cómo va? ¿Dónde está? ¿Qué vendes? ¿Tú lo atiendes?
Fíjate que la otra vez me encontré un compañero que estuvo en Atlante (Carlos Sánchez), estuvo conmigo en Atlante, nos contactamos por Facebook y me preguntó: ¿qué haces?. Y me dije: ‘sí es cierto’, le dije: ‘soy muchas cosas’ y le empecé decir. ‘Mira, soy profesor en un Colegio, pastor en una iglesia cristiana, ahorita esto de emprendedor en un negocio. Soy padre, esposo, dime ¿cuál quieres ahorita? Y aparte estoy estudiando el ENDIT, ahorita soy estudiante, etc, etc. Entonces, cuando contestaba eso decía, sí, esta etapa de mi vida se ha juntado con muchas cositas, que de alguna manera está uno invirtiendo para un futuro próximo y ese futuro es el negocio, rentamos afuera y es un local de hamburguesas, hot dogs, crepas, frapuccinos. Siempre mi esposa había tenido el gusto por los cafés. Pero más que yo ponerlo es por mis hijos, para que sepan lo que es ganarse el dinero, en que se gasta, el gusto por ganarlo, tenerlo. El negocio va bien, bendito Dios, la respuesta de la gente ha sido muy buena y hemos sacado adelante y nos ha ido bien.
¿Tienes poquito, no con ese negocio?
Es un negocio piloto. Te digo piloto porque está en mi pueblo, en el Plan. Nos ha ido muy bien, estamos abriendo viernes y sábado de 15:00 a 22:30 horas. La gente ha respondido muy bien, lo que pasa es que estamos sirviendo una hamburguesa bien, con todo respeto hay gente que vende hamburguesa en mi pueblo, pero hamburguesa, nosotros estamos dando otro tipo de hamburguesa, para lo que es el pueblo. Es algo piloto porque es algo que queremos llevar a mi casa, tu casa, donde tenemos un terreno más amplio para establecernos más en serio. Fue una iniciativa de la familia en el cual se le dedica mucho tiempo y pues ya sabes, la novia, etc. Mejor que vengan, si van a entrar a la familia, que vayan aprendiendo. Ahí estamos con el negocio y bendito Dios no ha ido excelente.
Desde que jugabas ¿ya traías este asunto de la religión o lo adoptaste más adelante? ¿Quién te lo inculcó? ¿Cómo estuvo?
No, fíjate bueno, siempre viene inculcado de los padres. Pero yo siempre he dicho que cuando uno crece, no es ningún borrego para seguir a quien sea, uno tiene la capacidad de discernir, pensar, somos seres inteligentes. Y saber qué es lo que realmente te trae bien, lo que realmente sirve: tus hijos, matrimonio, presente, saber el motivo por el cual estas en la tierra, destino, eternidad, lo pasajero que es este mundo, la vida que vas a tener aquí. Yo le digo a la gente: a mí no me digan, yo sé lo que es tener dinero, fama, mujeres. Sé lo que es vivir así, de tal manera que cuando tenga dinero. A mí no me digan que yo primero tengo dinero y después sigo a la religión o voy a ser famoso y después sigo la religión. Estuve a punto de perder a mi familia, perdí un hijo, falleció recién nacido y sé las consecuencias del por qué sucedió eso.
¿Cómo afrontaste la lamentable pérdida de tu hijo? ¿Qué edad tenían tú y tu esposa?
Fíjate que fue uno de los temas a lo mejor no futbolístico, pero estando dentro del ámbito profesional. Mi esposa estaba embarazada, me acuerdo muy bien, íbamos a un viaje a Estados Unidos con el señor Alberto Guerra, mi esposa estaba en el hospital México-Americano y fui y al siguiente día. Recibo la noticia de que ya se alivió yo repartiendo recuerdos a todos: muchachos soy papá, viajamos a California. Allá, temprano en la mañana, me hablan de aquí de Guadalajara: oye, falleció tu hijo. Nació prematuro. Me vine para abajo, es una de las peores cosas que me han sucedido, recibo la noticia cuando estamos desayunando y ya me dice Guerra: vete, ya les dije a todos que conectaran los vuelos para que regreses a Guadalajara.
Mi esposa tenía 18 años, yo tenía 21 y deja de eso, fue u golpe muy fuerte. No quisimos ir al entierro de nuestro hijo mi esposa y yo: nosotros creemos que cuando alguien ha fallecido, pues está ahí simplemente el cuerpecito, nos quedamos en casa, fue un trago triste y amargo momento.
De esta forma, Noé Zárate no solamente ha sido un campeón dentro de las canchas, sino fuera de ella, al sortear obstáculos de manera heroica, siempre acompañado de la fe en Dios.