Chivas y Leones Negros, por el título de la Copa Pacífica
GUADALAJARA, Jal., 13 de abril de 2016.- Kobe Bryant está a un último tiro, y todo mundo sabe que lo va a intentar. Tras de dos décadas asombrando al mundo, Bryant finalizará su carrera en la NBA en casa, cuando hoy se enfrenten los Lakers de Los Ángeles al Jazz de Utah.
De acuerdo a un comunicado de prensa, caminará dentro de la cancha enfrente de sus devotos fans, en el edificio en que ayudó a colgar cinco estandartes de campeón. Se retira como el tercero en anotación en la historia de la Liga.
Nadie pasó antes que él 20 campañas en la NBA y el hoy atleta de 37 años pretende honrar a los aficionados con una última demostración de su trascendente talento. “Significa todo”, finalizar su carrera en casa, dejó muy claro Bryant.
“Yo crecí como un fan recalcitrante de los Lakers, así que es como un sueño hecho realidad para un chico crecer y jugar para su equipo favorito, y hacerlo por 20 años, por toda su carrera”, añadió.
“He visto la ciudad crecer. Desarrollarse y viceversa. No hay otro lugar en el que quisiera finalizar mi trayectoria”.
Los boletos se han revendido por sumas exageradas y la mercancía que conmemora el evento ha sido comprada rápidamente. Los fanáticos que no alcancen asientos se reunirán en el centro de Los Ángeles para demostrar su amor por Bryant, un atleta admirado a nivel global que representó con fiereza a la comunidad angelina. Espectacular.
Con confianza al límite. Listo. Combativo. Cargado de ambiciones que parecían sobrepasarlo. Y siempre entretenía. “Desde la edad de 17 enfrente de esta fanaticada”, dijo Bryant.
“Muchos de los rostros que vi en mi primer juego siguen aquí. Eso es especial. Tipos que están sentados allí, en este momento, eran niños cuando primero me vieron, ahora vienen con sus propios hijos. Sabes, eso es genial presenciarlo”.
El coach de los Lakers, Byron Scott, espera que Bryant juegue más de 37 minutos, y sus compañeros planean pasarle el balón en casi todas las posesiones, algo común en esta pesadilla de campaña en que los Lakers se han colocado en el sótano de una Liga que llegaron a dominar a su antojo hace pocos años.
Con dos actuaciones de 30 puntos este mes, Bryant ha probado que sigue siendo capaz. Y tendrá la oportunidad de acaparar la anotación una última vez. “Creo que será una locura”, dijo Scott.
“Tenemos la oportunidad de celebrar a uno de los más grandes en jugar este deporte esta campaña, y creo que lo haremos de la forma correcta”.
Bryant, en medio del enjambre de medios de comunicación que lo asedia al fi nalizar cada encuentro, declaró la semana pasada que al menos que acabe con un título de la NBA, cada campaña es un fracaso.
Y es que los Lakers de esta temporada han sido cómicamente malos, la ineptitud del peor conjunto en la historia de la franquicia con 16 títulos, con marca de 16-65, le ha hecho más fácil disfrutar sus últimos momentos en el más alto nivel.
“No peleamos por campeonato, y sé lo que pienso de esa situación”, expresó Bryant. “Me he permitido disfrutar a los fans. Reír un poquito más. Interactuar otro tanto”.
Kobe ha tenido unas actuaciones para el olvido en los dos últimos enfrentamientos ante Utah, registrando cinco puntos en cada una, mientras ha atinado 3 de 19 desde el campo en dos palizas.
La más reciente marcó la derrota más acentuada de su trayectoria y empató la peor marca de la franquicia, un 123-75, el 28 de marzo.