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Fortalecerán Jalisco y gobierno federal coordinación en gestión de riesgo
GUADALAJARA, Jal., 27 de enero de 2019.-Para el Arzobispo de Guadalajara, José Francisco Robles Ortega, debería ser una obligación de todas las instituciones el velar por los derechos, la integridad y el respeto a las mujeres, y ahora que el gobierno pretende desaparecer el Instituto Jalisciense de las Mujeres debe justificarse sólo por una causa grave.
“A no ser una causa grave, que la desconozco, debiera desaparecer, si hay razones que no son graves, que no son urgentes, lo mejor sería mantenerla”.
Dijo que la Secretaría de Igualdad Sustantiva que ahora se hará cargo de esta política pública, debe priorizar el garantizar la dignidad de este sector de la población, el derecho a una vida libre de violencia y prevenir acciones que genera vulnerabilidad.
El prelado también dijo que un reclamo reiterado de la sociedad es que en casos donde las mujeres son asesinadas, exista un real acceso a la justicia.
Robles Ortega, a diferencia del Arzobispo de Morelia, dijo que en Guadalajara no existe solicitud expresa del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador para apoyar en la pacificación del país desde la fe católica, pero afirma que esta es una postura que todos los sacerdotes han asumido desde hace tiempo.
“Yo creo que esa es una labor que tenemos nosotros permanente, la misión que cumple el sacerdote en cada lugar donde está destinado con la predicación del Evangelio y con la implementación de las celebraciones de la fe y la administración de los sacramentos, el sacerdote está trabajando en esa línea de que el pueblo viva en coherencia con su condición de hijo de Dios y con su condición de hermano de todos.”
Dijo que ante el clima de violencia, los sacerdotes católicos sí trabajan por generar reconciliación, resolver las diferencias por la vía pacífica y los acuerdos, es decir, fomentar la paz.