
Plantea Lemus un parque lineal que conecte avenida México con Chapultepec
GUADALAJARA, Jal., 10 de mayo de 2022.- Mónica Marisela Castellanos, madre de familia y profesional de la Salud, es un ejemplo de la tenacidad de una mamá que hace todo por sacar a delante a su familia.
Actualmente como directora de la UMF No. 34 del Instituto Mexicano del Seguro Social, la más grande de la representación Jalisco, Mónica ha entregado 22 años al servicio médico, alternandolo con criar, junto a su esposo, a sus tres hijos de 17, 16 y 13 años de edad.
La mitad de su carrera como profesional de la salud, Castellanos Tadeo, ha ocupado puestos directivos. Su compromiso hacia los derechohabientes y su amor a la dependencia, se alternan con los que siente hacia su familia.
Como directora de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) No. 34, asegura que “es un honor pero también una enorme responsabilidad. Llegar aquí no ha sido fácil pero creo que las mujeres tenemos esa gran capacidad de salir adelante, ganarnos el respeto, alcanzar lo que queramos al atender varias cosas al mismo tiempo. El Instituto me ha brindado tantas oportunidades que siento el deber de regresar un poco de lo mucho que me ha dado”, aseveró.
En el marco del Día de la Madre, la médica compartió que viene de una familia donde fue la primera en ejercer la carrera, por lo que al inicio se trató de abrir camino. Como estudiante afrontó muchos retos que pusieron a prueba su vocación, pero sería la pérdida de su primer embarazo, a los siete meses de gestación, el evento que pondría a prueba su fortaleza como persona, ya que además hacía una residencia en Aguascalientes, lejos de su familia, y tuvo que prestar servicio en algunas comunidades.
Aunque siempre tuvo facilidad para la Cirugía Plástica, Castellanos Tadeo decidió especializarse en Medicina Familiar porque de esta manera no sólo podía atender a sus hijos ante cualquier eventualidad, sino prestar un servicio integral a miles de derechohabientes.
“En esta institución, en esta profesión, tenemos la oportunidad de ayudar a mucha gente que llega en un estado vulnerable. Solicitan nuestra ayuda que más que eso es nuestra obligación. Detrás de cada derechohabiente está una historia que podemos cambiar.
A mi Cuerpo le Gobierno busco reforzarle la importancia de una buena actitud y un fuerte sentido de pertenencia hacia el IMSS para dar lo mejor de nosotros cada día”, expresó.
Ser directora de una UMF y madre al mismo tiempo no ha sido un camino fácil, ya que ha tenido que ausentarse en muchos momentos de la vida de sus hijos, sin embargo, busca en todo momento procurarles todo aquello que necesitan, desde el amor hasta elementos de la cotidianidad ejerciendo también el rol de ama de casa. Su esposo, destaca, le brinda un fuerte apoyo para continuar su servicio público.
“Él, mis tres hijos y el Instituto son mi motor, mi orgullo, porque sí se necesita de una gran fortaleza espiritual y física para seguir adelante. Yo quiero que mis hijos sean personas responsables, disciplinadas, con valores, que den lo mejor de ellos mismos en la profesión que elijan, que sean incluso mejores que sus padres. Al IMSS yo le quiero regresar un poco de mi preparación y la de ellos, de mi aprendizaje, de mi superación, mejorar los servicios para que los usuarios se sientan cómodos y no duden regresar”, finalizó.