
Se reintegran policías de Teocaltiche y Villa Hidalgo con operativo
GUADALAJARA, Jal., 01 de enero de 2019.-Confía el Arzobispo de Guadalajara, José Francisco Robles Ortega en que este 2019 exista por fin claridad sobre los casos de personas desaparecidas como prometieron las nuevas autoridades, a nivel nacional con los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa y en lo local con los estudiantes de cine.
“Y yo creo que lo queremos todos porque en un momento dado todos pudiéramos ser víctimas de una situación semejante, primero solidarizándonos con ellos, ellos tienen derecho a saber cuál fue el paradero de sus hijos, el tratamiento que llevan los casos, pero todos tenemos derecho a prevenir que esto no vaya a suceder con nadie de nuestra familia.”
Tras la detención y después liberación del Coordinador Diocesano de Cáritas en Guadalajara, el Padre Francisco de Asís, el Arzobispo tapatío, José Francisco Robles Ortega manifestó su beneplácito porque aunque bajo presión, existiera justicia para el sacerdote, aclara que el organismo nunca actuó de mala fe en el litigio por una propiedad.
“Nunca quisimos prestarnos a una acción sucia, corrupta, sino apegada a derecho, apegada a la Ley, nunca obramos de mala fe, Cáritas nunca obró de mala fe, aceptó esos bienes como una donación para el bien que persigue Cáritas, y con esa intención lo aceptó, sin saber, sin estar advertido Cáritas de que esos bienes estaban en litigio, hasta después se supo y desde ese momento que se supo Cáritas manifestó no en retener esos bienes sino en devolverlos.”
El prelado puntualizó que tras el desistimiento del padre del presidente del Supremo Tribunal de Justicia, el sacerdote de Asís ya quedó completamente exonerado del caso, pero el proceso jurídico para devolver la propiedad seguirá conforme a Ley.
Indicó que en cuento fue liberado, habló con Coordinador Diocesano de Cáritas, quien estaba tranquilo y refirió que en los 4 días que estuvo en el reclusorio no fue maltratado ni abusado.
Robles Ortega dijo que no habló con el presidente del Poder Judicial en el estado, pero sí con otras autoridades para exigir el respeto a la Ley, y lamentó que tuviera que hacerse público el caso para que liberaran al sacerdote.