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Jalisco será la entidad clave en el proyecto Kutsári
GUADALAJARA, Jal., 26 de noviembre de 2019.-Con una misa solemne en el Templo Expiatorio de Guadalajara, el Arzobispo Emérito, Juan Sandoval Íñiguez celebró 25 años de su ordenación como Cardenal, rodeado de amigos dijo que sólo pide salud y voluntad para poder servir, la homilía estuvo a cargo del presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano, Rogelio Cabrera.
“Un amigo sincero y un pastor fiel, con alegría lo acompañamos en estas bodas de plata cardenalicias, bodas de plata bañadas de rojo, de la historia de nuestra iglesia, de la inmensa multitud de mártires que han acompañado al pueblo y le han dado el sentido de la fe, los mártires mexicanos, tantos y tantas mujeres que se hacen presentes en cada eucaristía.”
25 años de ser Cardenal se dicen fácil, pero fue un trayecto lleno de complicaciones que ahora observa con nostalgia el Arzobispo Emérito de Guadalajara, Juan Sandoval, muy festejado y felicitado con comida y mariachi pero que admite que a veces fue necesario dar algunos jalones de oreja, tampoco es muy optimista con la realidad que vive México.
“Como todo México, pues de mal en peor, está, ya saben ustedes, de mal en peor la situación de violencia ha empeorado en toda la nación, la situación económica, de aquí de Guadalajara, ¿yo qué hice?, yo no hice nada, traté de cumplir con mi deber, trabajar, atender a la feligresía y de cuando en cuando decir alguna cosa clara para iluminar la situación, fue todo.”
Dijo estar muy contento con las muestras de cariño y espera conservar su buena salud para poder seguir leyendo, que es algo que disfruta mucho, orando, lo cual hace más ahora que está en retiro, y de ser posible caminar un poco.