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GUADALAJARA, Jal., 7 de enero de 2024.- Los riesgos cardiovasculares que conlleva tener colesterol alto en la sangre (hipercolesterolemia) son altamente dañinos para la salud, por lo que el endocrinólogo Alfredo Pérez Nájera, adscrito a la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) Hospital de Especialidades del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco, recomedó una revisión anual de colesterol para prevenir y detectar a tiempo este padecimiento.
A través de un comunicado se detamlló que la hipercolesterolemia forma parte de las enfermedades conocidas como dislipidemias que se originan por alteración de los lípidos en la sangre.
Indicó que el llamado colesterol bueno (HDL) tiene la función de “recoger” la grasa del organismo y filtrarla a través del hígado, en tanto que el conocido colesterol malo implica daños severos a la salud debido a que ocasiona el taponamiento de arterias.
“El peligro del colesterol malo elevado es la forma en que la grasa se pega a las arterias y éstas se pueden tapar y generar consecuencias más adelantes, o también se pueden desprender estas placas e irse a arterias de menor calibre y finalmente taparlas”, refirió.
Respecto a los factores para la elevación del colesterol “malo” en el organismo, el especialista indicó que “las causas primarias están provocadas por patologías genéticas, son hereditarias y bueno son raras, y las secundarias se refieren a los hábitos alimenticios, el sedentarismo y problemas como la obesidad, entre otras que es lo más común”.
Explicó en cuanto a los aspectos genético hereditarios, que se debe revisar la historia familiar de hipercolesterolemia en parientes de primer y segundo grado, además de historial de infartos cardíacos en la familia en hombres antes de los 50 años o en mujeres previo a los 60 años.
También mencionó que otros riesgos que pueden implicar la necesidad de un chequeo médico en torno a la medición del colesterol en sangre son padecer diabetes, hipertensión o ser fumadores.
“En personas con factores de riesgo se recomienda un chequeo anual del colesterol, en personas sin antecedentes heredofamiliares o factores de peligro se indica a partir de los 25 años como una revisión rutinaria sin un periodo en específico, el cual puede repetirse de forma eventual”, destacó.
El doctor precisó que lo más frecuente es encontrar pacientes con colesterol bueno disminuido y con elevación de triglicéridos que tiene como factor de riesgo la ingesta de carbohidratos simples.
Detalló que, si bien la hipercolesterolemia tiene mayor prevalencia en los varones, en etapa de menopausia las mujeres suelen equiparse en incidencia debido a los factores hormonales.
“Más tiene que ver con la cuestión de los estrógenos que en este caso tienen un factor protector de riesgo cardiovascular, en los hombres pues eso también nos pone en riesgo el que no contamos con esas hormonas”, señaló.
Añadió que el manejo para pacientes con hipercolesterolemia incluye la orientación médico nutricional para un cambio de hábitos alimenticios y de actividad física y en casos en donde existe un mayor riesgo cardiovascular se otorga tratamiento farmacológico mediante el suministro de estatinas que contribuyen a reducir la producción de colesterol en sangre.