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MORELIA, Mich., 9 de octubre de 2020.- El Sistema Postal Mexicano que hoy conocemos es un servicio sobreviviente a la evolución de los sistemas de gobierno en nuestro país, cuyas primeras noticias preceden a la llegada de los españoles.
Es decir, ¡lleva más de 500 años vigente! David Cienfuegos y Esperanza Guzmán, investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), escribieron: “Los aztecas tenían diversos tipos de mensajeros: a) los painanis, corredor veloz o el de los pies ligeros, dedicados a transmitir los designios religiosos… b) los yciucatitlantis, que eran los mensajeros que llevaban datos urgentes a la metrópoli; c) los tequhuatitlantis o mensajeros de guerra… d) los tamemes o mensajeros, encargados de llevar productos o mercancías”, refiere la investigación publicada en la revista del Instituto de Investigaciones Jurídicas, de la UNAM.
Servicios todos que se han ido transformándose a las necesidades actuales, pero que en esencia se mantienen. Entre los cambios experimentados se encuentra la institucionalización del servicio. Los nombres con los que se le ha conocido es el: Correo de Mayor de Indias, Ordenanza General de Correos, Postas, Caminos y demás Ramos Agregados, dando pauta al monopolio de las comunicaciones por parte del Estado.
En los primeros años de la época del México Independiente se incorporó a la nueva hacienda pública, para su correcta administración del impuesto, sin embargo no fue sino hasta mediados del Siglo 19 que se reguló y a finales del mismo entró en vigor la primer ley al respecto y con ellos las normas para garantizar la privacidad de las comunicaciones, su resguardo, traslado, almacenamiento y entrega al destinatario.
Entre las atribuciones se encuentra la emisión de estampillas, una las más llamativas, ya que se han emitido miles de ediciones especiales, pero sobre todo a héroes, episodios de guerra, tradiciones mexicanas, personajes distinguidos y hasta la gastronomía.
Entre las que destacan, se encuentra la primera estampilla presentada el 21 de febrero de 1856 y estuvo dedicada al Cura de Dolores, Miguel Hidalgo, estampilla postal nacional que tuvo un costo de entre medio real hasta 8 reales.
Actualmente el Servicio Postal México, conocido popularmente como Correos de México, tiene su sede central en el corazón de la Ciudad de México, lleva 113 años en el mismo edificio y es oficialmente su quinta sede.
“La quinta casa de correos es un recinto que destaca entre todos los edificios del Centro de la Ciudad, dada su forma tan original”, dijo su directora Nidia Chávez Rocha el año pasado en su 112 aniversario, edificio símbolo de la modernización del país e influencia parisina del Gobierno de Porfirio Díaz.
El Sistema Postal Mexicano es tan completo que se encuentra conectado con países de los cinco continentes. “Nuestro país, a través del Servicio Postal Mexicano entrega y recibe correspondencia de los cinco continentes y atiende a cerca de 110 millones de habitantes en sus 116 mil puntos de atención a lo largo de toda la República”, expresa un comunicado oficial.
Con todo y que las comunicaciones se han acelerado por el uso de las tecnologías, se distribuyen 1.9 millones de piezas postales diarias, en el Centro de Actividades Logísticas más grande de la Ciudad de México.