
Tapatío rescata agónico empate frente al Atlante
GUADALAJARA, Jal., 20 de marzo de 2025.- El boxeo olímpico estaba en peligro, pues era uno de los deportes propuestos para que salieran del programa a partir de la justa de Los Ángeles 2028. Sin embargo, el Comité Olímpico Internacional confirmo en Costa Navarino, Grecia, durante su reunión número 144, que el pugilismo seguirá siendo una competencia de esta justa.
Para México, el boxeo es uno de los deportes que más preseas ha dado a lo largo de la historia de Juegos Olímpicos. El último medallista nacional de esta disciplina, Marco Verde, tomó con gran entusiasmo esta noticia, pues dará esperanza a futuras generaciones de pugilistas, que podrán luchar por darle al país gloria olímpica.
“No puedo estar más contento de que aprobaron el boxeo en los Juegos Olímpicos de Los Angeles 2028. La verdad, qué bueno para los jóvenes que quieren lograr el sueño de ir a los Juegos Olímpicos y lograr una medalla, así como yo lo hice. Fue un sueño y saber que tenían pensado quitarlo, sí dolía mucho. Más que nada porque yo que ya lo logré, sé lo que iban a pasar los jóvenes”, explicó.
Y es que lo vivido en unas Olimpiadas está por encima de cualquier otra cosa. En el caso de los boxeadores, el deporte profesional puede llenarlos de grandes cantidades de dinero, en caso de lograr sobresalir, pero la gloria de tener una medalla colgada al cuello, es algo que no se puede comprar. El pugilista mexicano recordó lo que vivió en París 2024.
“Al final es un proceso muy bonito, un proceso que todos lo quieren hacer y es algo inolvidable. Al final, es algo que va a quedar para mí siempre, toda la vida. Así que contento de que volvió el boxeo a los Juegos Olímpicos. Sé que esas nuevas generaciones de México van a dar todo para ir y lograr una medalla olímpica”, sentenció Marco Verde.