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GUADALAJARA, Jal., 15 de agosto de 2022.- El futbol ha dado una nueva demostración de que tener la pelota más tiempo que el rival no necesariamente es sinónimo de triunfo. Liverpool se presentó en casa durante la segunda jornada de la Premier League de Inglaterra y apenas pudo rescatar el empate 1-1 ante un inteligente Crystal Palace. Los Reds jugaron con uno menos desde el ‘56 y ya le fue imposible remontar.
La escuadra local había ganado nueve temporadas consecutivas su primer partido en Anfield. Ahora quería extender la racha y desde el inicio se adueñó de la bola. Al ‘8, Trent Alexander-Arnold lanzó un centro pasado a segundo poste, donde Darwin Núñez entró solo para disparar de volea, pero mandó la redonda por encima del arco.
De nuevo Trent Alexander-Arnold generó peligro al ‘22, con un servicio raso que Mohamed Salah remató por un lado. Trent Alexander-Arnold era la principal vía de ataque. Apareció otra vez, ahora por el centro y lanzó un pase profundo a la espalda de la defensa. Mohamed Salah alcanzó el esférico y conectó un cabezazo que controló el arquero. Liverpool era ampliamente superior. No le prestaba la pelota al rival. Pero en el futbol está demostrado que eso no es garantía de nada. El visitante esperó su oportunidad con paciencia.
La tuvo al ‘32. En un contragolpe letal. El arquero salió rápido y la pelota llegó a Eberechi Eze, quien tuvo una estupenda visión de campo parar filtrar el balón a zona peligrosa. Escapó por la izquierda Wilfried Zaha y entró al área. Se acomodó a la pierna derecha y con un toque raso, puso la pelota en el poste más levando para el 1-0. El Crystal Palace tomó ventaja, contra todos los pronósticos, apenas en su primera llegada del encuentro.
En el tiempo agregado del primer tiempo, los Reds buscaron la igualada. Harvey Elliott mando un servicio elevado y a la espalda, que Darwin Núñez bajó en la orilla del área chica con el pecho. Enseguida remató con pierna derecho. El impacto fue machucado, pero superó al arquero. Para mala fortuna de los locales, pegó en el poste y el lapso inicial terminó con la ventaja visitante.
En la segunda parte todo se complicó para Liverpool. El uruguayo Darwin Núñez forcejeaba con Joachim Andersen, quien le dio un empujón al hombro. El sudamericano perdió los estribos, volteó enojado y le dio un cabezazo. Recibió la tarjeta roja, dejó a su equipo en desventaja en el marcador y con 10 jugadores en el campo, al ‘56. La situación parecía difícil, pero el cuadro local no bajó los brazos.
El colombiano Luis Díaz controló el esférico por el costado izquierdo. Desde ahí, acerero para recorrer hacia el centro. Se quitó a cuatro rivales de encima. En la orilla del área dio vuelo a la pierna derecha y sacó un disparo con gran colocación. Superó al guardameta visitante. Las redes se movieron con el 1-1 que hizo explotar a Anfield. Pese a tener un jugador menos, los Reds se adueñaron del resto del partido y buscaron la victoria.
En la recta final, estuvo cerca de conseguirla. Al ‘85, Mohamed Salah controló de gran forma en la media luna, bajó la bola y de zurda le pegó con gran peligro, apenas a un lado. Y cuatro minutos más tarde, Fábio Carvalho prendió una volea desde la orilla del área que pasó a centímetros del palo.
Así, Liverpool no pudo presentarse en casa con triunfo. Su arranque en la Premier League no ha sido el esperado, pues sumó su segundo empate, en el lugar 12. Crystal Palace, por su parte, apenas tiene un punto, en el puesto 16.