Listo el Santuario para festejar a la Guadalupana

GUADALAJARA, Jal., 10 de diciembre de 2020.- Una de las fiestas más importantes para los católicos de México es sin duda la del 12 de diciembre, en honor a la Virgen de Guadalupe, sin embargo en esta año atípico por la pandemia del Covid 19 no se le podrá festejar como se acostumbra en nuestro país. La Basílica de México cerrada y en otros estados los templos que tienen como santa patrona a la Guadalupana tendrán que reducir sus visitantes o de plano también no abrir sus puertas.

En el caso del Santuario de Guadalajara las cosas no serán distintas y las autoridades eclesiásticas, aunque permitieron abrir, esperan un número reducido de fieles a la Reyna del Tepeyac.

Desde este jueves, quienes deciden darse una vuelta a felicitar a la Virgen de Guadalupe al Santuario se encuentran con un altar lleno de flores muy coloridas que reflejan sin duda el júbilo por un año más de las apariciones en el Tepeyac.

Aunque esta mañana se apreciaba poca gente la que decidía acudir al recinto sagrado, las autoridades esperan que conforme pasen las horas sean más los fieles que decidan ir a ver a la Guadalupana y así no aglomerar el atrio el día 12 de diciembre.

Los que acuden, desde la entrada se topan con restricciones siguiendo las medidas sanitarias. Si no usas cubrebocas no puedes entrar; toma de temperatura, debes pasar por los tapetes para desinfectar el calzado, tomar gel antibacterial, así como seguir los letreros de los protocolos.

En la puerta de entrada, una religiosa toma la temperatura y te ofrece gel antibacterial y al mismo tiempo te pregunta si has sentido síntomas relacionados con el Covid 19.

Ya al interior las bancas están seleccionadas para que unas sean usadas y las otras no, con cinta amarilla impiden que los fieles las utilicen, de igual manera en el piso de madera se colocaron cintas amarillas a más de un metro de distancia para que los que decidan ir respeten el espacio de la sana distancia.

Frente al altar, donde se encuentra la imagen de la Virgen de Guadalupe junto a San Juan Diego rodeadas de flores muy coloridas, fueron colocadas sillas negras para que los fieles se sienten a realizar sus oraciones o peticiones. Al finalizar los visitantes son invitados a utilizar la salida para evitar que se regresen y utilicen la entrada para abandonar el recinto.