Tráiler y arte activan El Juego del Calamar 2
GUADALAJARA, Jal., 14 de junio de 2016.-Pacientes con padecimientos crónicos, terminales, oncológicos, víctimas de accidentes, hemorragias y quemaduras y quienes requieren someterse a trasplantes y cirugías, son los principales acreedores de los bancos de sangre del ISSSTE y es por ello que la dependencia exhorta a sus casi 13 millones de derechohabientes a conformar una red altruista de donadores voluntarios.
En el marco del Día Mundial del Donante de Sangre, la dependencia de salud lanza un llamado para fortalecer la cultura de la donación de sangre y salvaguardarla para disposición de los derechohabientes que la requieren.
Actualmente el ISSSTE cuenta 44 bancos de sangre y 41 servicios de transfusión en el país, a través de clínicas hospitales, hospitales generales, hospitales regionales y en el Centro Médico Nacional “20 de Noviembre”.
Durante el 2015 se contó con 116 mil 975 donaciones, mientras que el primer cuatrimestre de este año suman 29 mil 523.
El Instituto cumple con los protocolos de control de calidad de la Norma Oficial Mexicana NOM-253-SSA1-2012 para la disposición de sangre humana y sus componentes terapéuticos, con lo cual brinda confiabilidad y seguridad a los donantes y a los receptores.
A pesar de que la Organización Mundial de la Salud, (OMS), señaló que cada año se reciben en el mundo 108 millones de unidades de sangre, la realidad es que los donadores de sangre en México está conformada por familiares y amigos de los pacientes, cuyo tratamiento requiere de transfusiones o amerita preverlas.
La meta nacional y de los bancos de sangre y servicios de transfusión del ISSSTE es incrementar las donaciones voluntarias provenientes de ciudadanos sensibilizados y altruistas, para que se sumen a esta práctica solidaria que no implica riesgos para su salud y sí abre posibilidades de recuperación, calidad y tiempo de vida para otras personas.
Entre los requisitos para ser donador se debe considerar lo siguiente: ser mayor de 18 años; pesar mínimo 50 Kg.; tener buena salud en general; presentar una identificación oficial con fotografía; acudir sin tos, gripe, dolores de cabeza o de estómago; no padecer o haber padecido epilepsia, hepatitis, sífilis, paludismo, cáncer, sida o enfermedades severas del corazón; no haber ingerido bebidas alcohólicas en las últimas 48 horas ni haber tenido ningún tipo de cirugía en los últimos seis meses; no haber sido vacunado contra hepatitis o rabia en el último año, no haberse realizado tatuaje, perforación o acupuntura en el último año y acudir con ayuno mínimo de 4 horas.