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GUADALAJARA, Jal., 24 de septiembre de 2024.- A petición de la Fiscalía de Jalisco se extendió la prisión preventiva oficiosa a los presuntos secuestradores de la alcaldesa de Cotija, Yolanda Sánchez, quien fue asesinada posteriormente.
El plazo cautelar en presidio fue determinado a un año, y se solicitó la ampliación por seis meses más o un año, y el Fiscal de Jalisco, Luis Joaquín Méndez Ruíz, expone que, el hecho de que la alcaldesa fuera asesinada, no implica el caso deje de juzgarse. “El delito está cometido, con independencia de que posteriormente haya sido localizada, (tras la privación de su libertad), la conducta está, que es lo que se trabaja, y vamos a seguir en el procedimiento”.
Fue plagiada en Zapopan, Jalisco
La alcaldesa fue sustraída por sujetos armados el pasado 23 de septiembre, cuando regresaba al hotel Diana de Guadalajara, Jalisco, después de estar en el centro comercial Plaza Andares en Zapopan, donde departió con dos mujeres que la acompañaban al momento de ser plagiada en el cruce de la avenida Patria y la calle Gabrielle D’Annunzio, en la colonia Jardines de la Patria, de Zapopan, donde circulaban a bordo de un taxi.
Previamente, la servidora pública asistió a una cita médica, y no tenía a su personal de escolta.
El vehículo de alquiler fue interceptado por sujetos armados, quienes se la llevaron consigo, junto a una de sus acompañantes, esta última fue lanzada desde el vehículo a unas calles del sitio de la privación de la libertad.
Antes, los plagiarios las fotografiaron para saber a quién debían secuestrar.
Tres días después, el 26 de septiembre, la presidente municipal de Cotija, fue liberada en el Pueblo Mágico de Mazamitla, Jalisco, colindante de Michoacán, donde fue subida a un autobús con destino a Zamora; en el trayecto, ella consiguió un teléfono y habló con su director de Seguridad Pública municipal, Omar Alfredo Santillán, para informarle que estaba en camino a su municipio, y la Guardia Nacional interceptó el camión en que viajaba, en la localidad de Villamar cerca de Jiquilpan y Cotija.
Luego, a tres días de su liberación, mediante operativos de la Fiscalía Especial en Personas Desaparecidas (FEPD) de Jalisco se detuvo a sus plagiarios: Raúl A, Adrián A y Miguel Ángel D, quienes están sometidos a prisión preventiva oficiosa por un año, por la presunción de haber incurrido en el delito de desaparición cometida por particulares agravada, y también están vinculados a proceso por delitos contra la salud, delito por el que se les detuvo en primera instancia.
Los sujetos iban a enfrentar el juicio en libertad, pero se les aseguró cuando salían del complejo carcelario de Puente Grande, y les fue ejecutada la orden de aprehensión por su presunta participación en la privación de la libertad de la alcaldesa.
Los tres imputados son originarios de Michoacán, y se reconocen como adeptos del CJNG.
Asesinada junto a su escolta
La presidenta municipal fue asesinada a balazos, por varios sujetos cerca de la Plaza Principal del municipio que gobernaba, cuando caminaba junto a su escolta, al salir de un gimnasio; su custodio resultó herido de muerte al repeler la agresión.
Ambos fallecieron mientras recibían atención médica en el hospital regional de Los Reyes, en tanto los causantes huyeron.
La Fiscalía de Michoacán indicó que los sicarios usaron fusiles conocidos como cuerno de chivo.
El nuevo alcalde fue hostigado desde antes de asumir
Tras el asesinato de la alcaldesa, el CJNG, grupo criminal al que se atribuye el crimen, emitió en redes sociales, amenazas contra el alcalde de Cotija, Juan Pablo Aguilar Barragán, quien recién había sido electo.
Mientras la dirigente estatal del PAN en Michoacán, María del Refugio Cabrera Hermosillo, llamó a los gobiernos federal y estatal a reforzar la seguridad de Cotija y el resto de la entidad.
Se encuentra ilocalizable
Al momento el edil electo se encuentra ausente de su cargo desde hace días, algunas versiones refieren que también fue amenazado y habría huido a Estados Unidos; trasciende que se podría establecer un concejo municipal para ejercer las labores de gobierno.
Así mismo, se ha vuelto recurrente la presencia en la localidad de personas armadas, afines al grupo delictivo.
El municipio es parte del llamado corredor de la muerte, en los límites de Michoacán y Jalisco, donde se registran acciones de cárteles en busca del dominio territorial.