GUADALAJARA, Jal., 11 de enero de 2021.- La División Especializada en la Atención a la Violencia contra las Mujeres (DEAVIM) en Guadalajara inició operaciones en septiembre de 2019, sin imaginar, que precisamente de ese organismo, que se supone vela por la no violencia, saldrían denuncias de abuso de autoridad, prepotencia, hostigamiento, humillación, amenazas y despidos injustificados de la unidad.

La Comisaria, Saira Alejandra Franco Leal, que está al frente de la DEAVIM y la primer comandante, Sandra Nuño Vélez, son señaladas de ser generadoras de toda esta situación, según denuncias anónimas llegadas hasta Quadratín Jalisco.

Tienen casi prohibido enfermarse de Covid 19 y pedir incapacidad o vacaciones, porque si lo hacen, se desquitan con los compañeros que quedan, señalándoles que por culpa de los enfermos, los van a traer trabajando de más.

Utilizan la frecuencia de radio para gritar, humillar y burlarse. También para amenazar a los que opinan diferente y llegar al grado de remover a todo aquel elemento que «ya no les cae». No les renuevan el contrato de tres meses y a los de plaza, sin consultarles, los cambia de áreas.

Desde hace más de un año que inició operaciones esta unidad, que tiene unos 70 elementos, han removido a entre 15 y 20 con cualquier pretexto. Ellas mismas lo deciden, acuerdan las «permutas» hacia otras áreas sin consultar a los trabajadores. En un sólo día, han realizado hasta 4 cambios de personal.

«Aquí los directivos de la Policía, nunca se han preguntado si con tanto movimiento de personal, ellas son las que están mal, o los elementos que se van, señalan».

Sandra Nuño -señalan- es la encargada de ejercer acciones de arresto cuando no les agrada algo por parte de un policía.

Ya van al menos dos quejas en la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), un trabajador que contrató abogado por su movimiento laboral que hicieron sin su consentimiento y recientemente, una carta de inconformidad que ya llegó hasta la sala de los regidores y del propio presidente municipal, Ismael Del Toro.

Pero los denunciantes temen que no pase nada, porque, así como está protegida Franco Leal por el comisario Jefe de la Policía de Guadalajara, Jesús de Anda Zambrano, señalan que quizás el alcalde seguirá en la misma creencia de que todo está en paz al interior de la DEAVIM.

Aseguran que son muchos más los inconformes, pero que no hablan precisamente por temor a represalias de que los corran, cambien de área o los arresten.