Aclaró que estos casos son graves, como lo son otros con más tiempo y que aún no ha sido resueltos.
Todos deben tener el mismo tratamiento y no diferenciarse con el ofrecimiento de una recompensa de un millón de pesos, como se hizo con los jóvenes, expuso Robles Ortega.
«El que ha desaparecido recientemente y el que desapareció hace mucho y no tenemos noticia, todo es grave», dijo.
El arzobispo se sumó al reclamo de los familiares y de la sociedad de certeza sobre el paradero de estas personas.
«La verdad es que hay muchos casos sin resolver, muchos, no de ahora, no recientes, de años hay casos que no han tenido solución», recordó.