GUADALAJARA, Jal., 12 de mayo de 2020.- La obesidad en México que está presente en más del 70 por ciento de la población y que está relacionada con el alto consumo de refrescos, con un promedio de 163 litros al año por persona, son la otra pandemia en el país, la que aumenta el riesgo de morir en caso de contraer Covid 19, advirtió el director de Vigilancia de la Nutrición del Centro de Investigación en Nutrición y Salud, Mario Flores Aldana.

 “La persona fallece por asfixia, porque no puede tener un adecuado intercambio de gases, entonces, si además de este virus que produce una gran inflamación en el que nosotros ya tenemos un proceso inflamatorio de base, porque tenemos sobrepeso, obesidad o alguna otra enfermedad crónica, este proceso inflamatorio va a ser todavía más grave, y por otro lado al estar nuestro proceso inmunológico ocupado en reducir toda esa inflamación sistémica asociada al sobrepeso, obesidad y las enfermedades crónicas, va a tener menos fuerza para defenderse del virus”.

Aunque acciones como la imposición de un impuesto especial del 10 por ciento a las bebidas azucaradas sí logró reducir un poco el consumo de refrescos en México, esto es insuficiente, porque sigue estando directamente relacionado con la obesidad y el sobrepeso, advirtió el Jefe del Departamento de Entornos Saludables y Prevención de Enfermedades Crónicas  del Centro de Investigación en Nutrición y Salud, Edgar Denova Gutiérrez.

 “La obesidad está íntimamente relacionada con la inflamación, pero también está íntimamente relacionada con una menor respuesta inmune, lo que se ha demostrado es que esta respuesta inmune está disminuida en su capacidad de responder ante las infecciones y por lo tanto enfermamos de manera más severa y de manera más fácil por ciertos virus o bacterias en este caso Covid 19, la recomendación es eliminar el consumo de refrescos y de bebidas azucaradas, ya tenemos una política pública, hemos tenido un efecto positivo del impuesto al refresco, pero faltan políticas públicas más agresivas para reducir aún más el consumo de refrescos”.

Es indispensable que el gobierno federal establezca acciones más radicales para reducir el consumo de refrescos en México, como considerarla industria no esencial, retirarlos de las escuelas y restringir su publicidad, además de transparentar el uso que le dan al IEPS, aseguró el director de El Poder del Consumidor,  Alejandro Calvillo.

 “Cada mexicano está gastando alrededor de 8 pesos al día en promedio, imaginen  la cantidad que eso representa, por eso el poder de estas empresas que no ha permitido que tengamos una regulación ya efectiva en las escuelas para que no estén las bebidas azucaradas, siempre han estado, no han dejado de estar allí las bebidas azucaradas, tampoco se ha logrado regular prohibir la publicidad de este tipo de productos dirigida a niños”.

Puso el ejemplo de Chile, donde sí han logrado una reducción de 20 por ciento en el consumo de estas bebidas y donde también aplican un impuesto especial pero sí transparentan en qué destinan esos recursos, sobre todo en apoyo de las comunidades más pobres y para llevarles agua potable para beber, que es una gran asignación pendiente en México.

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