CIUDAD DE MÉXICO, 14 de octubre, 2019.-“Es nuestra principal preocupación y ocupación», señaló el presidente de la República Andrés Manuel López Obrador al dar la introducción del informe sobre seguridad a poco más de 10 meses de su gobierno.

Con la presencia de todos los representantes del Gabinete de Seguridad, el Jefe del Ejecutivo reconoció que es de las asignaturas pendientes a las que más se les invierte tiempo, toda vez que se reúnen todos los funcionarios involucrados entre semana, previo a sus conferencias matutinas.

López Obrador cedió la palabra a Alfonso Durazo, titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), para dar el informe.

“Hablaríamos de una crisis de inseguridad crónica que marcó sexenios, por décadas”, reprochó sobre la herencia de la administración del ex presidente Enrique Peña Nieto y antecesores.

Detalló con cifras del INEGI que tan solo durante el año 2018, se registraron alrededor de 33 millones de delitos con 25 millones de víctimas.

Durazo puntualizó que la alta incidencia de delitos, la impunidad y la corrupción, fueron provocando que la cronicidad de este problema social fuera más severa.

Tras presentar diversos indicadores de la magnitud de la problemática que debe atender la Federación, justificó “este es el reto que estamos enfrentando para garantizar condiciones adecuadas de seguridad”.

Robo y asalto en calle o transporte público, extorsión y fraude, son los tres delitos que precisó como los de mayor incidencia en México.

Alfonso Durazo destacó que con el Plan Nacional de Paz y Seguridad 2018-2024, se parte de una idea motriz: La paz y la tranquilidad son parte de la justicia, atender las causas de la violencia, rediseñar las corporaciones con respeto irrestricto a los derechos humanos, recuperación de cárceles para evitar el autogobierno, así como el uso de la inteligencia para combatir al crimen organizado.

Afirmó que se dejó atrás el espionaje, la tortura, represión, destacando además la creación de la Guardia Nacional.

El secretario hizo un recuento de las políticas aprobadas para consignar como delitos graves diversos ilícitos, resaltando la intervención de las Fuerzas Armadas en la seguridad pública y la Ley de extinción de dominio.

Arropado por el Presidente y los secretarios de la Sedena, Semar, Segob y el titular de la Guardia Nacional, aseveró que se está combatiendo la inseguridad, con la implementación de estrategias mayormente de inteligencia que se acompañan con operativos en campo.

“Vamos a enfrentar el problema de las drogas desde una perspectiva de salud y el comercio desde una visión de seguridad pública”, enfatizó, para evitar la criminalización de las personas adictas.

Exaltó además de la implementación de la atención de adicciones, la profesionalización de corporaciones de policías y los sistemas de justicia.

“No se trata de echarnos la bolita pero voy a citar sólo a los estados que tienen un superávit de policías Yucatán, Colima, Tabasco y CDMX”, apuntó.

Durazo recordó que en la historia del combate al narcotráfico no existe congelamiento de cuentas, que ahora en esta administración alcanzan los 5 mil millones de pesos, con la estrategia de atacar las finanzas de células criminales.