Visión Financiera
Enfermería y filosofía
¡Hola estimado lector! Iniciaremos un ciclo de análisis de diversas carreras universitarias a través de la filosofía de Santo Tomás de Aquino.
Ojalá sirva de reflexión y de valoración de los estudios profesionales en cada área académica.
Recordemos que, Santo Tomás de Aquino, fue un filósofo y teólogo del siglo XIII.
Desarrolló una filosofía profundamente influenciada por Aristóteles, enfocándose en la razón y la fe como vías complementarias para entender la realidad.
Sus enseñanzas abarcan la ética, la naturaleza humana y la búsqueda del bien supremo.
Pues bien, la enfermería es una profesión que no solo se fundamenta en el conocimiento técnico y científico, sino que, también, integra principios éticos y filosóficos.
Analizar la enfermería a través de la filosofía de Santo Tomás de Aquino nos permite entender el profundo valor moral y humano que subyace en esta profesión.
1. El Bien Común
Uno de los pilares de la filosofía de Santo Tomás es el concepto de bien común. En la enfermería, esto se traduce en el compromiso del profesional de la salud con el bienestar de los pacientes y la comunidad.
La enfermería, vista desde esta perspectiva, no solo es una profesión, sino una vocación de servicio al prójimo, orientada a promover la salud y aliviar el sufrimiento.
2. La Dignidad Humana
Santo Tomás subraya la importancia de la dignidad humana, argumentando que todas las personas, independientemente de su condición, poseen un valor intrínseco.
En la enfermería, esto se manifiesta en el trato respetuoso y empático hacia todos los pacientes.
Cada intervención de enfermería debe reconocer y preservar la dignidad del individuo, fomentando un ambiente de cuidado y respeto.
3. El Principio de la Caridad
La caridad, entendida como amor y compasión hacia el prójimo, es central en la filosofía tomista.
Para los enfermeros, practicar la caridad implica ofrecer cuidado con compasión, entendimiento y generosidad.
Esta perspectiva humaniza la práctica enfermera, promoviendo un cuidado centrado en la persona y no solo en la enfermedad.
4. La Prudencia y la Toma de Decisiones
La prudencia es una virtud cardinal en la filosofía de Santo Tomás, definida como la capacidad de tomar decisiones correctas basadas en la razón.
En enfermería, la prudencia es esencial para la toma de decisiones clínicas y éticas.
Un enfermero prudente evalúa las situaciones de manera objetiva, considerando las mejores acciones para el bienestar del paciente.
Así que, integrar la filosofía de Santo Tomás de Aquino en la enfermería no solo enriquece la práctica profesional, sino que también proporciona una base ética sólida, viendo al paciente como una persona humana y no, como un número más. (El autor es académico UAG).
– A mí no me molestaría qué me llamaran el bíceps o el músculos de acero.
– Y ¿si te llamamos el sin cerebro?
¡¡¡PLOP!!!