
La Ahogada, el que la prueba se pica
MUESTRAN PODERÍO
Impresionantes, poderosos y retadores lucen un grupo de sujetos fuertemente armados junto a camionetas camuflajeadas con el logo de un cártel delincuencial, esto a un día de la visita del presidente de la República a Jalisco, estado donde se fundó el grupo criminal.
En un video difundido en redes sociales se observa la magnitud del grupo criminal; lamentablemente las armas y vehículos que se observan superan en mucho a las que utiliza un policía municipal, un elemento de las policías estatales e incluso los elementos de las Fuerzas Armadas de México.
La famosa frase de “Abrazos, no balazos”, no puede ser adaptada al video que alcanza grandes números en redes sociales y es que queda muy claro que el grupo criminal que realizó las tomas y acomodó a sus sicarios junto a los vehículos no piensan en dar abrazos. Más bien el video lo difundieron para mostrar su poderío y dejar en claro a sus rivales y a las autoridades estatales y federales que va a ser muy difícil hacerles frente.
La pregunta es para el señor presidente, ¿qué pasaría si su convoy se topara con un convoy de este grupo criminal?.
En las imágenes hay una larga fila y a ojo de buen cubero se contabilizan más de 100 vehículos blindados y camuflajeados, así como por lo menos 500 sujetos utilizando lanza granadas, armas de grueso calibre y equipo táctico similar al de las Fuerzas Armadas.
Lo curioso es que el video circula en redes sociales un día después de que el presidente visitó el estado de Jalisco, cuna del grupo criminal, y luego de que el mandatario asegurara que existe la estrategia y la unidad con los gobiernos estatales para terminar con la delincuencia.
Quedó demostrado con el video difundido, señor presidente, que no va a ser nada fácil pues en respuesta, los criminales mostraron el poderío que tienen y que es de dar miedo a la población; queda claro que el crimen organizado tiene terreno libre para circular y hacer este tipo de grabaciones que dejan muestra de que no van por abrazos.
UN DÍA DURÓ EL PACTO
Todo lo que dijo Enrique Alfaro en la mañanera del jueves ante el presidente Andrés López Obrador, se la llevó el viento. Ese pacto de trabajar de la mano del Gobierno Federal para sacar a Jalisco adelante en medio de la emergencia sanitaria duró 36 horas.
Bastó para que este viernes en la conferencia de Hugo López-Gatell colocaran al Estado de nuevo en semáforo rojo, para que Alfaro saliera a arremeter contra el subsecretario de Salud.
Una vez más tacha al especialista de politizar el tema de la pandemia de Covid 19. De cambiar los criterios para volver a poner a Jalisco y otros 17 Estados en zona de alarma por los casos de coronavirus.
El mandatario jalisciense señala que hay personas (Gatell) que quiere siga peleado con el Presidente.
Apenas que habían hecho el pacto López Obrador y Alfaro en la visita del titular del Ejecutivo a Zapopan este jueves y ahora empezamos de nuevo.
Veamos cómo le responden a Alfaro en la próxima conferencia.
DÉCADA PERDIDA
La falta de desarrollo económico y un nulo crecimiento marcan ya, una década perdida en México entre el 2010 y el 2020. Si el gobierno de Enrique Peña fue desastroso, económicamente, el de López Obrador tiene índices francamente desalentadores. Once millones de nuevos pobres por la pandemia se suman a los 52.4 millones que existían previo al brote.
Los programas sociales de combate a la pobreza de la actual administración han sido tan sólo un paliativo que no han logrado atajar el impacto social y económico del Covid 19. La pandemia en México lanzará a la pobreza a miles de mexicanos, que han perdido su empleo, su modus vivendi, o su negocio, agudizando la situación de miseria en el país que ya padecían millones de compatriotas antes del brote de coronavirus.
Es importante destacar que tales programas de bienestar”, como les llama la administración federal solamente sirven para producir una clientela política, fidelizada, que habrá de responder a las directrices de su principal patrocinador en las próximas elecciones intermedias. Las dádivas en dinero no incentivan la productividad, tampoco incrementan de manera sustancial el consumo, no elevan el nivel de vida de las familias, ni producen derrama económica en las comunidades.
Son paliativos económicos que le están costando carísimo al país, toda vez que, por mantenerlas, con el consiguiente clientelismo, se han recortado programas de apoyo a muchos sectores sociales, a la salud, a la educación, al desarrollo económico, en aras de una malentendida austeridad republicana, que lo único que evidencia es una mala administración y un desvío de las prioridades del desarrollo por las de la popularidad popular.
El coctel del desempleo, salarios parciales, inflación y, la mal llevada nueva normalidad ha provocado un efecto negativo en la economía mexicana. La pandemia se prolongará, a decir de las autoridades, en su primera ola hasta el mes de octubre. Esta emergencia sanitaria ha propiciado un colapso económico no vivido en los últimos 100 años. A decir de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) sufriremos una contracción económica de -9 puntos del PIB, llevando a miles de hogares al hambre y a la desnutrición, poniendo en un mayor riesgo su salud.
Los consumidores sin ingresos no tienen poder de compra; no hay circulante en el mercado. Las ventas no son posibles y el comercio se cancela. Estamos muy lejos aún de domar la pandemia del covid 19 y por si fuera poco, enfrentamos un país grosera y grotescamente dividido, en el que el Presidente de la República considera que él es la única ruta a seguir. Hay un 50 por ciento que lo cree así, pero sin duda va a necesitar de la otra mitad del país para que cualquier estrategia pueda fructificar y sacar adelante a México de este oscuro panorama.