
La Ahogada, el que la prueba se pica
EL DESAFORTUNADO PROTAGONISMO DE ENRIQUE ALFARO
El calificativo pretende ser tan preciso, como su semántica lo requiere. En el sentido más amplio, es desafortunado, porque como dicen en el rancho “el horno no está como para bollos”. Alfaro acusa directamente a López Obrador de ser el instigador, detrás de muchos “infiltrados” en la manifestación de ayer en el centro de Guadalajara. Señala en el video que presenta anoche en su cuenta de Twitter, que salieron unos 150 del parque Rojo y que, cuando llegaron al centro, ya eran casi mil que aparecieron de quien-sabe-dónde, para provocar violencia. Acusó a “El Presidente y su partido” de ser responsables de hacer llegar gente de la Ciudad de México para vandalizar una protesta en la que dice, de fondo, estar de acuerdo.
Alfaro sabe, y sus asesores también, que el Presidente tiene un 53 por ciento de aceptación en el escenario nacional, y que cuenta con un 41 por ciento de desaprobación, es decir que sólo hay un 6% de ciudadanos indiferentes a todo, o algunos de este porcentaje, equilibrados, pensantes y sensatos, mientras que en el país hay dos polos antagónicos. Alfaro apunta su mensaje hacia los inconformes con la gestión de AMLO y echa mucha más leña a una hoguera anímica que fue, precisamente, el caldo de cultivo de una protesta como la de ayer en Guadalajara.
Como sucedió en Jalisco, cuando la política económica, social y de salud de una entidad, para evitar contagios en la pandemia, quedan en manos del policía, como último eslabón de la cadena entre ciudadanos y gobernantes, suceden episodios como el del desafortunado hombre victimado en Ixtlahuacán de los Membrillos. De ello, el Gobernador es corresponsable. No puede nada más asomar en pos de imagen a sus redes y dejar el peso del vínculo con el ciudadano a los policías, y menos a los de línea de las corporaciones municipales.
En el afán de protagonismo mercadológico y de conquistar a esta franja de indiferentes, o por lo menos de hacer dudar al sector del 53 por ciento de convencidos, Alfaro se equivoca. Ya López Obrador le contesta esta mañana que, si tiene pruebas, compruebe su afirmación. Por descontado que, ante la debilidad de la memoria colectiva, Alfaro dejará que pasé el suceso (eso sí va a presentar culpables y a instruir al fiscal que les aplique todo el peso de ley en el caso Giovanni) y no probará nada. Es el discurso, para seguir en la tónica ranchera, de “tirar la piedra y esconder la mano”. Pero además de polarizar, innecesariamente la delicada situación social y emocional del país, el discurso de Alfaro erra al tratar de reafirmarse ante los 41% anti AMLO como la mejor opción para ocupar la presidencia en la próxima elección.
Su excesivo protagonismo lo hace adelantarse demasiado a los tiempos, con el desgaste consecuente. Hoy reta y acusa a López Obrador. Mañana verá seriamente comprometidos los apoyos federales en dinero para Jalisco. Hoy esgrime la soberanía del Estado, mañana la hipotecará ante la carencia de flujo, con un crédito impagable para varias generaciones y para sucesivos gobiernos estatales, a los que comprometerá en sus finanzas futuras. Eso poco importa, lo relevante es posicionarse hoy como el retador designado ante el campeón López Obrador para la siguiente elección.
Sin embargo, Alfaro equivoca, desafortunadamente, la estrategia política. Andrés Manuel y su partido son un bloque sólido con más de la mitad de la aprobación nacional. El 41% de los inconformes con la 4T se van a dividir entre los liderazgos emergentes, de los cuales, Alfaro es sólo uno de ellos, no es único contendiente en la palestra. Su urgencia por saltar al escenario a la menor provocación le impide apreciar el todo y sólo le deja ver la parte que le conviene.
¿Pero le conviene a Jalisco el pleito de Alfaro con López Obrador? El Presidente es una “chucha cuerera” en política, otro término campirano para definir al hábil en un rubro. Ya declaró que no se va a enganchar y mientras Alfaro dijo lo mismo, es evidente que él puso el anzuelo para tratar de pescar a un escurridizo López Obrador, que es un pez muy ducho en evadir este tipo de reyertas. En conclusión, Alfaro está obligado ahora a probar, con credenciales del INE en mano, que por lo menos 900 provocadores vinieron de la ciudad de México, en transporte súper veloz, para estar a tiempo por la tarde a una convocatoria que las redes comenzaron a emitir con pocas horas de anticipación. Como seguramente no lo podrá hacer, veremos cómo el tema se diluye en un asunto de “dimes y diretes”. Mientras tanto, el líder moral de la 4T, lo sabe hacer muy bien, va a apuntar con precisión en su libreta de notas emocionales todos los rencores, para esperar el momento propicio de asestar el golpe de imagen contra Alfaro, o peor aún, la medida que realmente afecte a los ciudadanos jaliscienses y que pueda ser, al final de cuentas, achacable al régimen del acelerado gobernador de Jalisco.
DETENCIONES MANCHAN MANIFESTACIÓN
Resulta increíble pensar que en medio del caos que reina en Jalisco, luego de los hechos violentos este jueves en el corazón de Guadalajara, la autoridad haya actuado de manera arbitraria en la segunda manifestación de este viernes con detenciones ilegales.
Contrario al día de ayer, que fue la primera manifestación por la muerte de Giovanni, ahora las autoridades parece que reaccionaron y pretendieron romper una de las marchas mucho antes de la llegada al sitio de reunión que sería la Fiscalía de Jalisco en la calle 14.
Detenciones que fueron calificadas como arbitrarias y fuera de protocolo, cometidas por personas vestidas de civiles, no solo fueron denunciadas en redes sociales a través de videos y textos, también la propia Comisión Estatal de Derechos Humanos denunció los hechos.
Resulta inadmisible que independientemente de su procedencia, jóvenes hayan sido detenidos al no permitirles el libre tránsito y el derecho a la libertad de expresión, esto fue lo que reinó en este segundo día de manifestaciones en Jalisco.
VAN A RODAR CABEAS
El gobernador de Jalisco reconoció que un grupo de elementos de la Fiscalía General del Estado actuaron de mala manera y en efecto se llevaron a varios muchachos que pretendía llegar a calle 14. Prometió que va a investigar el actuar de éstos y llegará hasta las últimas consecuencias.
Lleva una semana de pesadilla el mandatario del Estado. Desde que se dio a conocer el video de la detención de Giovanni. Cuando se supo que había muerto a manos de policías. Luego la ola de violencia en manifestaciones del jueves en el Centro de Guadalajara y para cerrar lo ocurrido este viernes con la amedrentación de los funcionarios de la Fiscalía.
La imagen a nivel nacional está manchada. Lo mucho que había ganado Alfaro con el control de la pandemia, lo acaba de perder en pocos días. Será muy difícil que limpie lo que sus funcionarios policiales hicieron.