PRESUMEN MÁS DE LO QUE HICIERON

“Dime de lo que presumes y te diré de qué careces”… dicho para bajar de su nube a cualquiera, y en esta ocasión se aplica a la perfección para aterrizar a los presidentes municipales de la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG) quienes, sin duda, en este año electoral dejaron mucho que desear.

Desde la semana pasada arrancaron los alcaldes a promocionar sus obras bonitas y sus logros obtenidos a lo largo de 3 años, otros de 6 por la reelección.

Pero han dejado de lado lo que en verdad duele a cada municipio: la inseguridad, tema que fue dejado de lado, y si se tocó fue muy por encima o sólo para presumir nuevas inversiones, pero no logros en el combate a la delincuencia, pues los robos y homicidios son su mayor coco.

Queda claro que se lograron cosas, normal, ese es el trabajo de los gobernantes, acciones que benefician a su gente, que los ayuden a vivir mejor, no sólo obras que jalen los reflectores, que es el caso en todos pues en cifras nacionales hay crecimientos en delincuencia y aumento en la pobreza.

Se podrá echar la culpa a la pandemia del Covid 19, pero decir o hacer lo contrario es una buena obra para presumir; sin embargo, esto no ocurrió.

En Guadalajara, Eduardo Lomelí, ha tomado el toro por los cuernos a sabiendas del paquetote que se echaba encima y que le había dejado el anterior alcalde, Ismael del Toro, quien por cierto nadie sabe dónde anda.
Cumplió en limpieza, cultura, no escatimó en salud, en medio ambiente, invirtió en su Comisaría pero los números no le dan un visto bueno, pues comerciantes, transeúntes y visitantes al Centro de la Ciudad siguen sufriendo, lo que han batallado todo el año con robos y asaltos en sus diferentes tipos.

Zapopan no cambia, una administración de 6 años que se fue más por las obras, mismas que al final dieron el veneficio a pablo Lemus para colocarse en Guadalajara. La apuesta a la remodelación en espacios públicos y la edificación del Centro Integral de Servicios de Zapopan benefician a la ciudadanía; sin embargo, el coco de Pablo en su Gobierno, fueron los homicidios en el municipio y las inundaciones no lo soltaron año con año.

Quienes no tuvieron perdón de Dios son los alcaldes de Tlaquepaque, Tlajomulco y Tonalá, con una administración para el olvido, sobre todo en el tema de seguridad, los homicidios, huachicoleo y robos los posicionaron como los peores municipios de la ZMG.
Tlaquepaque es sin duda el peor municipio en violencia durante la administración de 6 años.

Hay problemas de inseguridad todos los días, les abandonaron cadáver, balacera, ejecutaron personas junto a sus oficinas, multihomicidios, narcofosas, y todo lo malo les ha pasado a ellos.

Sin duda lo que digan queda en segundo plano pues es un municipio marcado por la sangre y las balas, tan mala fue la administración que la exalcaldesa, María Elena Limón que ya ni regresó.

Tlajomulco de Zúñiga, otra administración que pasa de largo, pero que tendrá una nueva oportunidad.
Salvador Zamora tendrá que recapacitar su gobierno sobre todo en el combate al huachicoleo y evitar que les sigan enterrando cuerpos en su municipio pues esta marcado como el que más fosas se localizan con alto número de difuntos.

De no poner atención y trabajar más por los tlajomulquenses, Movimiento Ciudadano podría perder su bastión político.

Y pues de Tonalá, el patio trasero de Guadalajara, sigue siendo eso y esta administración hizo poco, o casi nada por cambiar el mote.

Multihomicidios, tiradero de cadáveres, pero lo que más les duele en Tonalá; son las bandas de ladrones que parecieran tener paso libre por el municipio y son las familias las que terminan pagando los platos rotos, asaltados al bajarse de su unidad del transporte público o al ver sus viviendas vacías al regresar a casa.

Su desfile de comisarios deja en claro que en el tema de seguridad, el alcalde, Antonio Gonzáles, nunca supo por dónde trabajar.

Así las cosas en los municipios de la Zona Metropolitana de Guadalajara donde los Informes de Gobierno resultaron ser excelentes, presumieron su trabajo.
Pero queda muy en claro que quedan mucho a deber a los ciudadanos, sus ciudadanos, unos se van y serán olvidados. Otros se quedan y tienen mucho por hacer.

Ojalá que el próximo año sí presuman con acciones que cuidan a sus gobernados.