GUADALAJARA, 21 de julio de 2016.- Nuestra democracia está en crisis: cada vez son menos las personas que creen que la democracia es la mejor manera de solucionar los problemas públicos. Latinobarómetro dice que sólo 48% de los mexicanos creen que la democracia es preferible a cualquier otra forma de gobierno. Es decir, más de la mitad de los mexicanos no creen en la democracia. Las cosas no están yendo por buen camino. El riesgo de esto es que aflora los sentimientos de autoritarismo, algo que hemos visto ya en otros países y poco a poco lo vemos más presente en el nuestro.
Nos queda claro que debemos hacer algo para cambiar esto. Y como decía el ex canciller alemán Willy Brandt, los problemas de la democracia se resuelven con más democracia. Dicho esto, y en el contexto de que en el Congreso de Jalisco estaremos por discutir una reforma electoral, es que traigo aquí algunas propuestas que pueden ayudarnos a renovar nuestra democracia, poniendo en el centro a las personas y no a grupos políticos cupulares:
- Regidores de mayoría relativa. Querido lector, ¿conoces a los regidores que integran tu ayuntamiento? ¿Sabes cuál es la labor de un regidor? Hoy en día, bajo el sistema político en el que vivimos, es difícil poder contestar estas preguntas. Necesitamos replantear la manera en la que elegimos a nuestros regidores, para que cierta parte de ellos pueda ser electos como representantes de una demarcación. De esta manera, sabremos quién es la persona que nos representa dentro de un ayuntamiento y así poder acudir con ellos cuando tengamos algún problema municipal.
- Segunda vuelta para la elección a gobernador. Una de las razones por la cual hay tan baja legitimidad en los gobiernos es precisamente porque nuestros gobernantes son electos con tan poco porcentaje de los votos. Por ejemplo, el mes pasado el candidato electo como gobernador en Oaxaca obtuvo menos de una tercera parte de los votos.
- Partidos políticos locales. Los partidos políticos están entre las instituciones más desacreditadas. Queda claro que no están cumpliendo con su labor de ser un enlace para representar a las personas. Por esto, tenemos que repensar a los partidos políticos para que, más que franquicias políticas en manos de unos cuantos, sean pequeñas células desconcentradas más cercanas a las personas y, claro, con menor financiamiento público.
- Listado de plurinominales en la boleta electoral. Quizás el cargo público menos popular en México es el de los diputados de representación proporcional, mejor conocido como los plurinominales. Esto se debe en gran parte a que sentimos que no los votamos directamente pero siguen siendo una herramienta que fue creada para tener una mejor representatividad para fuerzas políticas pequeñas.
- Poder legislativo con igualdad de género. Debemos de buscar paridad de género en la conformación del Congreso y no sólo en las listas de candidatos y candidatos. No podemos lograr una representatividad real cuando el 50% de la población queda fuera de la fórmula.
Esta es sólo una pequeña lista inicial de temas a considerar para comenzar un debate que se viene para nuestro Congreso en Jalisco y que esperemos sea replicado en otros estados.