Libros de ayer y hoy
¿Ha observado, estimado lector, que, desde hace algunos años, este país del este de Europa se distingue por ser la única nación de este bloque de veintisiete estados en defender los valores tradicionales de la familia y de la vida
No paran las amenazas sobre todo de tipo económico por parte de los todopoderosos tecnócratas de Bruselas para que cambie su actitud, pero sin resultado; sigue firme en su postura.
A continuación, vamos a ver por qué, según mi humilde opinión, esta nación con un pasado glorioso está prometido a tener un papel de primer plan en el futuro…
¿Cómo explicar que este pequeño país con un población de 9, 678.000 habitantes, superior por un millón a la del estado de Jalisco, esté enfrentando la ira de estos monstros que constituyen la Unión Europea y Estados Unidos?
La comparación con David y Goliat no me parece descabellada y vamos a verlo a través de su historia recién y remota; Hungría tuvo que resistir contra múltiples invasores antes de su fundación por el gran príncipe Arpád en el siglo IX: los celtas, los hunos, los eslavos, los romanos etc. pero cuando su bisnieto, Esteban, accedió al poder en el años 1000, convierte el país al cristianismo. Luego, después de un periodo de paz de unos cinco siglos, el reino de Hungría fue forzado a integrar el imperio otomano durante 150 años.
Después de haber estado bajo el dominio de los Habsburgo y posteriormente la historia reciente, Hungría luchó al lado de Alemania durante la Segunda Guerra Mundial y todos los “boomers” se acordarán de que entre 1947 y 1989, estuvo regida por un gobierno socialista.
Después de esta breve y necesaria paréntesis, conviene señalar que el mismo rey san Esteban (del que hablamos antes) en el acto de coronación por el papa Silvestre II el 25 de diciembre del año 1000, ofreció la misma corona a la Virgen en un acto de valentía, fe, reverencia y amor. Y a partir de este momento, Hungría pertenece a la Virgen quien lo quiere preservar de todos los peligros que la amenazan, visibles o invisibles. Pero, para mantener intacto este privilegio, en esta batalla final entre la humanidad y Satanás, entre Cristo y el Anticristo, este país debe responder a la llamada de la Virgen, viviendo con Jesucristo de una forma más completa; debe pasar de un estado de laxitud, flojera, complacencia y materialismo hasta un estado de transformación radical hacia Dios.
Así como lo vemos en la historia de la humanidad, Dios siempre se apiada de los chiquitos, de los humildes, mientras queden fieles a Él; tomamos el caso de Israel en el Antiguo Testamente y más recientemente de Portugal, privilegiada por recibir los mensajes de Fátima. Por eso, podemos decir que Hungría tiene una misión especial en nuestros días; es un ejemplo para la Unión Europea y no al contrario… La misma Unión Europea necesita de Hungría.
En el mismo momento en que Hungría diera culto al verdadero Dios, su protección se hará sobre este país.
¡Forjamos deseos para que esta nación siga siendo este baluarte de resistencia contra las fuerzas del mal!