Por fin inician los foros para debatir la despenalización de la marihuana. La discusión transita en dos sentidos.
Por un lado en el Congreso, activistas, especialistas y comentócratas tiran la neta del planeta para debatir el uso de la hierba mala para las buenas conciencias.
Por el otro, el aparato oficial promueve el análisis de especialistas acerca de los efectos de la cannabis en la salud de los consumidores y del cuerpo social. Faltan cuatro: derechos humanos, impacto económico, consecuencias sociales y uno para asuntos generales.
El Poder Legislativo discute legalizar el consumo de la marihuana no sólo para fines terapéuticos y dejar de distraer cuantiosos recursos del Estado al criminalizar a los pachecos que se la truenan con un churro. Las tésis liberales alegan que permitir el uso de la hierba lúdica, si bien no acabará con la violencia derivada de la guerra contra el narco, en mucho contribuirá a aminorar tales efectos perjudiciales.
El Gobierno se opone tajante a la tésis de la mota lúdica, sin embargo sabe que con una posición ultra conservadora lleva todas las de perder, por eso da una sobadita alivianadora a los liberales proclamadores de la mota legal para elevar la moral y envía al doctor Manuel Mondragón –Comisionado Nacional Contra las Adicciones– a proponer el aumento de la cantidad permitida para ser portátil por cualquier hijo de vecino; Doce carrujos contra dos legalmente tolerados.
¿El gobierno intenta disfrazar el consumo de mariguana sin liberarlo descaradamente?
Mientras se concluye si la marihuana es hierba mala o hierba buena, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) rebota 217 solicitudes idénticas a las del colectivo SMART, aquel grupo de cuatro ciudadanos a quienes la Suprema Corte les aprobó un amparo para permitirles producir, portar y consumir la hierba con fines recreativos.
El fondo del debate marihuano es lo que debe ocurrir con la producción y comercialización.
¿El gobierno federal juega con dados cargados?
Seguramente acabará por ceder y autorizar el uso de la marihuana sólo con fines terapéuticos. La ONU y la Iglesia Católica apoyan la tésis; lo contrario significaría dejar a México rezagado respecto a la tendencia internacional.
EL MONJE EDUCADO: Primero fue lo urgente, ahora viene lo importante. Jurídicamente se logró la reforma educativa, prácticamente ahora viene la revolución con las escuelas al centro… y pa’dentro. Bienvenido el anuncio del secretario Aurelio Nuño.
@JoseCardenas1 | [email protected] | www.josecardenas.com