Ese día se presentó a una farmacia ubicada en avenida Tepeyac, en la colonia Mirador del Sol, del municipio de Zapopan y estando dentro sacó de entre sus pertenencias un cuchillo con la que amagó al empleado de la sucursal y lo obligó a abrir la caja registradora para despojarlo de 470 pesos, para después huir.
El ladrón se dirigió al cruce de las calles Beethoven y Patria, en la colonia Lomas del Seminario, y de nueva cuenta, utilizando la misma mecánica, se apoderó de mil 500 pesos en efectivo.
Tras el robo, el encargado del establecimiento informó lo sucedido a las autoridades, por lo que los elementos comenzaron a buscar al sujeto, a quien sorprendieron en posesión de lo hurtado.
Después de ser aprehendido Arturo N. el agente del Ministerio Público que conoció del hecho, lo puso a disposición del juez.
Durante el proceso que se le siguió a dicho sujeto, el Juez Décimo Tercero de lo penal, determinó que los elementos de prueba aportados por la Fiscalía General del Estado eran suficientes para declararlo culpable por el delito de robo calificado, por lo que le impuso una condena de 13 años en prisión, y el pago de 701 pesos como multa.
Cabe decir que en aquel entonces las autoridades presumieron que como el sujeto iba saliendo de una fiesta y ya no tenía dinero para seguir bebiendo, fue que presuntamente se decidió a cometer ese ilícito.