Atropellan a multitud en mercado navideño en Alemania; hay un muerto
GUADALAJARA, Jal., 26 de agosto de 2016.- En un acto protocolario en donde se le exigió a los invitados vestir de colores oscuros, además de que se restringió la entrada a medios locales y a los presentes, la salida, se realizó la investidura como Doctor Honoris Causa a José María Aznar, en el salón de actos del Centro Cultural La Garza. Esto, una hora después de lo programado y en un contexto en donde el ex presidente español es señalado por crímenes de lesa humanidad.
Desde que la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH) anunció la investidura de Aznar, la polémica se desató por su presencia en la Feria del Libro Universitaria (FUL), lo que molestó a los ciudadanos españoles que radican en la entidad, así como a los académicos, quienes cuestionaron la máxima condecoración que otorga la institución a un político cuestionado por su promoción a la guerra de Estados Unidos contra Irak en 2003.
Hace un mes apenas se dio a conocer la investigación The Iraq Inquiry o Informe Chilcot, la cual revela que el bombardeo a Irak en 2003, no tuvo ningún proceder legal, pues no se encontraron armas de destrucción masiva, y fue una campaña que convino financieramente a Estados Unidos, en ese entonces gobernada por George W. Bush, y avalada por Tony Blair, ministro de Reino Unido, así como a José María Aznar, presidente de España.
Una caravana de siete camiones blindados, una ambulancia de cuidados intensivos, así como patrullas de policías estatales, antecedieron la llegada del ex presidente español.