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GUADALAJARA, Jal., 19 de septiembre de 2021.- Los números de Víctor Manuel Vucetich al frente de Chivas no fueron malos. Alcanzó casi el 50 por ciento de productividad durante los 43 partidos que estuvo al frente del Rebaño Sagrado. Lo que terminó por condenarlo fueron las formas futbolísticas, que para nada convencieron ni a los aficionados ni a los directivos rojiblancos.
El llamado Rey Midas dirigió 37 partidos de Liga y 6 más de fase definitiva. Es el único entrenador después de Matías Almeyda que ha logrado meter a Chivas a la Liguilla por el título del futbol mexicano. El saldo en los 43 partidos que estuvo al frente del Guadalajara fue de 16 triunfos, 16 empates y 11 derrotas. En puntos, eso se traduciría en 64 de 129 posibles, para un elevado 49.61 por ciento de productividad.
Por si fuera poco, fue despedido en medio de una buena racha, pues Chivas había conseguido ocho de los últimos 12 puntos en disputa, ganó los últimos dos partidos de local, algo que le costaba mucho trabajo y además era el único equipo de la Liga MX que no había recibido gol jugando como visitante. Su salida no fue por los números, sino por las formas.
Víctor Manuel Vucetich se convirtió en el único entrenador después de la salida de Matías Almeyda en 2018 que logró calificar a Chivas a una Liguilla por el título. En el Guard1anes 2020, su primer torneo al frente del equipo, el Rey Midas llevó al equipo a repechaje, donde dejó fuera al Necaxa. Después se enfrentó al América en Cuartos de Final.
Aunque para la crítica partía como víctima, el Guadalajara sorprendió al dejar fuera a las Águilas. Ganó sus dos encuentros con tres goles de Cristian el Chicote Calderón y se sacudió la paternidad que tenía América cada vez que se topaban en Liguillas. Pero en Semifinales fue eliminado por León, que a la poste resultaría campeón.
Para el Guard1anes Clausura 2021 de nuevo metió a Chivas en la fase final. Pero el repechaje frente a Pachuca fue un desastre. El Rebaño Sagrado perdió por 4-2 y desde ese momento los aficionados rojiblancos exigían su salida. Con el correr de los partidos, la evolución del equipo no fue lo que se esperaba. La paciencia de los seguidores se agotó y en los últimos tres encuentros como local, la grada grito “¡Fuera, Vuce!”. Finalmente, el técnico está fuera de la institución. Se va con casi el 50 por ciento de productividad, pero un futbol que no convenció.