GUADALAJARA, Jal., 18 de noviembre de 2019.- La historia de Jorge Vergara trascendió y marcó la vida de muchos, tanto que para Omar Bravo ahora con su muerte se convirtió en una leyenda.

“¿Qué te puedo decir? Ya es una leyenda para mí, escuchaba por ahí que las grandes personas no mueren sino que se convierten en leyendas. Para mí, él ya entró en ese rubro porque dejó huella en muchos corazones, en muchas personas, en su empresa, en jugadores que han tenido la oportunidad de trabajar en su grupo. Es así para el futbol mexicano y sobre todo para el Guadalajara específicamente”, explicó este domingo al término del encuentro de Leones Negros ante Zacatepec.

Bravo recuerda los momentos en que convivió con el empresario; a pesar de que en algún momento tuvo una salida de Chivas un poco complicada, siempre tuvo las puertas abiertas y se llevó muy bien con él.

“Vivimos un montón de situaciones, de este lado hay muchas que me voy a quedar en la intimidad, por supuesto, tantas la verdad, fueron tres etapas en Chivas. Fui un privilegiado, siempre lo manifesté, por estar en el equipo, porque más allá de las situaciones que tanto él como yo entendemos que tiene esta industria del futbol, que a veces te vas como jugador libre y aún así regresé un par de veces más. Nunca se tomó nada personal, me apoyó infinidad de ocasiones en temas personales también. Siempre le agradecí y que diga ahora yo algunas cosas no es nada que cambie lo que yo le había dicho personalmente”, señaló.

Durante su etapa como dirigente del Rebaño Sagrado, Vergara fue odiado por muchos, por muchas decisiones que tomó, pero para Omar, fue poco comprendido.

“Creo que no se puede entender la modernidad en Chivas sin la dirección de Jorge, detectó oportunidades, las encausó para un beneficio, creyó en México, vio que las Chivas son el mejor representante de México, un equipo con puros jugadores mexicanos. Apostó por la modernidad del futbol, hizo un estadio hermoso, propició y apoyo la salida de jugadores a Europa. Siempre trató de dignificar su slogan de su empresa, de gente que cuida a la gente”, expuso.

El Mochiteco recordó la manera en que trata a sus empleados y narró uno de los grandes momentos que tuvo con él.

“Siempre trataba de dignificar su slogan de gente que cuida a la gente. Personalmente, me apoyó en varias ocasiones, pero dentro de la felicidad y la euforia, qué te puedo decir, estuvimos abrazados tantas veces, pero por supuesto que la de 2006 en un restaurante aquí, nos fuimos hasta que rueden las calacas, como dicen. Lo disfrutamos al máximo, pocas veces lo había visto así. Habíamos perdido la final con Pumas, con esos sinsabores teníamos la espinita clavada y se logró en el 2006”, dijo.

Tras conocer la notica de la muerte de Jorge, Bravo comentó que solo le escribió a su hijo para darle el pésame.

“Un mensaje nada más para Amaury, ya había tenido la oportunidad de reunirme con él anteriormente, hace un par de meses más o menos. Estaba por ahí más o menos enterado de la situación, siempre manejando la situación con mucha prudencia”.

Ahora que Amaury se encarga desde hace tiempo de comandar al Guadalajara, para Bravo fue una gran elección y para él, está listo para enfrentar los retos como presidente.

“Por supuesto, mira cómo era Jorge tan sabio que ha dejado todo su legado en Amaury, que tiene hambre. Está preparado, más de lo que muchos creen y tiene la ilusión de acrecentar su legado o de superarlo. Seguramente dará de qué hablar, más que su papá”, finalizó.