Pocos, pero entusiastas aficionados en Paramaribo

PARAMARIBO, Surinam., 23 de marzo de 2023.- Muy lejos está la pequeña grada de pintarse con el color verde. Tan lejos de México, difícil esperarlo. Surinam tampoco es un país que tenga a muchos habitantes nacidos en suelo azteca. En el Estadio Franklin Essed, son pocas las camisetas del Tricolor que hay. Pero las que llegan para el partido correspondientes a la Nations League de la Concacaf, se muestran entusiastas.

Dos de ellos han hecho un largo viaje. El Caramelo es sumamente conocido. Va a todos los encuentros de la Selección Mexicana desde hace cuatro décadas. También se encuentra en el inmueble Carpinteyro, conocido como el Trotamundos Tricolor. Llegar a este punto del mundo no es para nada sencillo, como relata uno de ellos.

“Estaba en Miami, fui a apoyar a la Selección Mexicana de Beisbol en la Semifinal. Posteriormente, dije me voy a Surinam y cuál va siendo mi sorpresa, que no había vuelos. Tenía que agarrar un vuelo de Miami a Ámsterdam y de ahí a Paramaribo. Eso era una opción, la segunda era Miami-Lima-Sao Paulo-Belén-Paramaribo. En ambos casos eran de 22 a 24 horas de trayecto. Posteriormente, busqué un vuelo doméstico y encontré una avioneta que volaba de Georgetown a Paramaribo. Lo logré hoy en la mañana”, señaló Caramelo.

“Después, fue una bronca porque me pidieron la vacuna de la fiebre amarilla. Luego, no habían la vacunación hasta las 9 de la mañana. Y se tenían que juntar nueve personas para abrir el fresquito de la vacuna. Todavía tenía que esperar eso, dije no voy a llegar, me la voy a tener que perder. Finalmente, le comentamos al de migración que veníamos en tránsito, de Miami, que habíamos estado solo unas horas en Sao Paulo. En Georgetown autorizaron desde Surinam que pudiera abordar y aquí estoy sin perderme ni un partido de la Selección Nacional”, sentenció.