Tapatío acaricia el título del Apertura 2024
GUADALAJARA, Jal., 8 de agosto de 2024.- Lo hecho por Marco Verde es histórico. Se ha colgado la plata, pero sabe a oro. El boxeador mexicano llegó hasta la final, algo que no se conseguía desde 1984. Cerró con todo el último round, pero no le alcanzó, pues en los dos primeros del combate fue superado. El combate se definió por decisión unánime a favor de Asadkhuja Muydinkhujaev de Uzbekistán. Los cinco jueces le dieron el triunfo por 29-28.
Marco Alonso Verde Álvarez ganó la presea olímpica número 14 del box en la historia del deporte mexicano. Puso a soñar a un país entero. Paralizó a millones de compatriotas que la tarde de este viernes frenaron cualquier actividad para ver su combate. No llegó el oro, pero es un ganador.
Roland Garros se pintó de verde. Marco contó con gran apoyo por parte de los aficionados. En las gradas había banderas nacionales. El grito de “¡México, México!” se escuchó constantemente. Sobre el cuadrilátero, Verde medía a su rival en los primeros instantes de combate. Duelo parejo en e que no había una clara ventaja para ninguno de los contendientes, pero los cinco jueces le dieron el primer episodio al uzbeko, todos por 10-9.
En el box olímpico, la suerte se define rápido: apenas tres rounds para alcanzar la gloria del oro o quedarse con la plata. El mexicano tenía que subir la intensidad para el segundo episodio, luego de perder en puntos el primero. El rival mantenía distancia y Marco Verde comenzó a soltarse en busca de impactar a Asadkhuja Muydinkhujaev.
Con el deseo de buscar el rostro de su adversario, también dejó espacios en la guardia que aprovechó el uzbeko para impactarlo sólido en un par de ocasiones. Al término del round, los cinco jueces vieron perdedor al mexicano, de nuevo por 9-10. Para soñar con el oro, solamente le restaba buscar un nocaut en el último episodio, pues por puntos estaba condenado a la derrota.
Y así, Marco Verde abrió el tercer round soltando los puños. En Roland Garros se escuchaba el grito de “¡sí se puede!”. Muydinkhujaev se apartaba, buscaba la distancia o abrazaba cuando el mexicano lo impactaba de cerca. Sabía que solamente necesitaba dejar pasar el tiempo para llevarse la victoria. El mexicano impactaba, pero el tiempo se le terminaba.
El uzbeko siguió dando pasos atrás. Huía del contacto. Tenía el oro en el bolsillo. Sonó la campana y terminó el combate. Los cinco jueces vieron ganador al mexicano por 10-9 en el último episodio. Pero al final, Asadkhuja Muydinkhujaev triunfó por decisión unánime: los cinco encargados de las tarjetas le dieron victoria por 29-28.
Así, al sinaloense se le escapó la oportunidad de subir a lo más alto del podio. El Himno Nacional Mexicano no se escuchará en esta oportunidad. Pero el éxito de Marco Verde sabe a oro. Es la medalla olímpica número 14 que da el box al deporte azteca: ocho de bronce, cuatro de plata y dos de oro. Un pugilista de este país no llegaba a una final en Juegos Olímpicos desde hace 40 años: en Los Ángeles 1984, Héctor López también cayó y se quedó con la plata.