Presentan programa del Maratón Internacional Guadalajara
GUADALAJARA, Jal., 24 de julio de 2024.- En un partido simplemente insólito, Argentina se presentó en los Juegos Olímpicos de París 2024 con una derrota por 2-1 frente a Marruecos. La polémica apareció cuando se agregaron 15 minutos al partido y los sudamericanos lo igualaron 2-2 al ‘105 de tiempo corrido. Más de una hora después, el VAR anuló el tanto por fuera de lugar y se ordenó jugar tres minutos, en los que el marcador ya no se movió.
La confusión reinó cuando Cristian Medina empató el partido pocos segundos después de cumplirse los 15 minutos que se habían agregado. Y es que sobre la cancha comenzaron a llover toda clase de objetos. Inclusive, aficionados marroquíes enfurecidos invadieron la cancha. Los jugadores argentinos corrieron a refugiarse en el vestidor.
Parecía que el árbitro había dado por terminado el encuentro. El 2-2 aparecía como finalizado en el sitio del Comité Olímpico. Pero 40 minutos después, cambió el status a “interrumpido”. La invasión de cancha provocó una suspensión. El estadio fue desalojado. El VAR revisó a detalle la jugada y detectó un fuera de lugar. Más de una hora después, anuló el gol. Así, arrancó con polémica el campeonato de futbol en París 2024.
Sobre la cancha del Estadio Geoffroy-Guichard, en Saint-Etienne, el conjunto marroquí sorprendió a todos los presentes. En el tiempo agregado de la primera parte, Ilias Akhomach sacó un taconazo dentro del área que habilitó a Bilal El Khannouss, quien llegó a línea de fondo. Lanzó un centro raso, que Soufiane Rahimi mandó al fondo de las redes, para el 1-0.
En el arranque de la segunda parte, la zaga argentina se equivocó en zona baja. Ilias Akhomach peleó y ganó el balón en la línea de fondo. Ingresó al área y fue derribado por Julio Soler. El árbitro señaló penal. Al ‘50, Soufiane Rahimi se paró frente al manchón, cobró con pierna derecha, potente, raso y cruzado. El guardameta adivinó, pero no logró evitar el 2-0 de Marruecos.
Argentina estaba contra la pared y obligado a ir al frente. Al ‘67, Joaquín García recibió por el costado derecho. Lanzó el centro pasado y por izquierda, dentro del área, apareció Julio Soler. Controló y soltó el zurdazo cruzado. Cerca de la línea de gol estiró la pierna Giuliano Simeone para empujar al fondo el 2-1 que daba vida a su equipo.
Los minutos transcurrieron con los marroquís aguantando el vendaval hasta cumplirse el tiempo regular. La sorpresa de todos fue cuando el árbitro decidió agregar 15 minutos, algo por completo inusual. Los sudamericanos insistían al frente. Se habían cumplido ya esos 15, cuando un disparo potente fue desviado por el guardameta para entonces pegar en el travesaño.
Vino enseguida un cabezazo que dramáticamente se volvió a estrellar en el travesaño. Entonces, la bola quedó a merced de Cristian Medina, quien solamente tuvo que empujar al fondo el agónico 2-2 que celebraron con euforia los sudamericanos. Se fueron al vestidor en medio de buenos arrojados por parte de los aficionados.
Después se sabría que el partido no se dio por finalizado, sino que se suspendió. Las gradas fueron desalojadas tras los disturbios y más de una hora después, los jugadores debieron volver a la cancha, ya con el estadio vacío para jugar tres minutos adicionadores y con el gol del empate anulado. Marruecos aguantó el 2-1 y se llevó la victoria para llegar a tres puntos en el Grupo B, en espera de lo que atan Irak y Ucrania, que se enfrentan poco más tarde.