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GUADALAJARA, Jal., 14 de julio de 2021.- Nacho Ambriz, nuevo técnico del Huesca de la Segunda División de España, tiene a dos futbolistas mexicanos en la mira. Pero hay un impedimento para que pueda llevarlos como refuerzo: el elevado precio que le ponen a los jugadores. No es un tema de ahora, es histórico, pues incluso revela que cuando estaban en Osasuna como auxiliar de Javier Aguirre, quisieron llevar al Cabrito Jesús Arellano y su precio lo hizo imposible.
“He tenido dos reuniones, por el momento no se ha tocado ningún refuerzo mexicano. Es cierto que nos falta gente por llegar que se está hablando con ella, pero te reitero es aventurarme. Necesito definir bien quién, si realmente hay alguna posibilidad de traer algún jugador mexicano, quién sería. Tengo uno o dos en mente que me gustaría, pero también pertenecen a equipos que no es nada fácil. Tú mejor que nadie sabes que no te los ponen a precios accesibles, entonces tengo que ver quién realmente podría venirnos a ayudar, que se adapte a lo que es el futbol europeo en la Segunda División”, explicó.
“Si se da, seguramente traeremos a alguien y si no se da por este torneo, bueno pues, pero sí el equipo está buscando los refuerzos para armar un equipo muy competitivo. Tengo una gran base que el club ha hecho un gran esfuerzo que se está quedando y nada, simplemente conforme transcurran los días irá llegando la gente. También consciente de que por ahí de esa base, hay algunos jugadores que se podrían ir porque acá se pagan las cláusulas de rescisión de contrato y se pueden ir”, añadió.
“Es cierto y no es de ahora, tú conoces muy bien lo que es el futbol mexicano, muchas veces Hugo Sánchez lo ha dicho que el jugador mexicano tiene que salir, que el entrenador tiene que salir. Los precios no son nada baratos, recuerdo mucho cuando ayudé a Javier por acá, que se interesó por uno que otro, recuerdo muy bien el nombre, el Cabrito Arellano lo quería llevar a Osasuna, pero el precio era demasiado caro para un club como Osasuna, que no llegaba a ese precio”, recordó Nacho Ambriz.
Reconoce que en México tanto jugadores como entrenadores tendrían que poner más de su parte para poder emigrar. “Dices una palabra, sacrificio. Me es difícil pensar que sacrifico cuando me dedico a lo que me gusta y me pagan por lo que me gusta. En esa parte he hecho grandes esfuerzos para siempre cumplir sueños, metas que me propongo. Siempre he dicho alguna vez como jugador quise venir a Europa, nunca se me dio. Después, a los chicos que he tenido siempre los invito que se aventuren a venir acá”, detalló.
“Como todo en la vida tienes que picar piedras y tienes que mostrar de lo que eres capaz. Cada quién se va trazando sus metas, sus ambiciones. A todos los entrenadores nos encantaría andar por todo el mundo dirigiendo, pero a lo mejor no somos vistos o realmente es una Liga que no vemos. Otra cosa, el precio de buscar jugadores mexicanos no es nada barato. Después el reto personal de cada entrenador es cada quien su criterio. Yo vengo a cumplir un sueño y otro sueño es quedarme muchos años por acá”, agregó el técnico del Huesca.
Y puso como ejemplo a José Juan Macías, quien acaba de pasar al Getafe de la Primera División de España sacrificando tanto él como Chivas. “No sé muy bien la negociación de JJ Macías, pero agradecer a la directiva de su club que le permite salir en otras condiciones, siendo un hombre que se ha ganado un nombre, que pinta para ser uno de los mejores, que no tengo la menor duda que triunfará. Ese pequeño esfuerzo uno lo dice de afuera muy fácil, pero los dueños sabrán qué posibilidades le dan los jugadores, que a mí me gustaría que se las den para poder venir a Europa”, aseveró Nacho Ambriz.
“Hoy date cuenta, no tan fácilmente el jugador mexicano sale a jugar. A Macías le costó mucho, hoy está el chico Muñoz de Santos por ahí escuché a su entrenador que estaba inquieto porque lo habían regresado a casa porque tiene la oportunidad de venir para acá. No es nada fácil, pero una vez que lo logras, te tienes que adaptar a tu sueño, a tu forma de querer triunfar en Europa y nada, simplemente te reitero, si doy la opinión de alguien que pueda venir, tengo que entregar un buen informe para que pueda venir”, continuó.
Finalmente, admitió que jugadores y entrenadores con inquietud de salir tienen que sacrificar porque son muy poco conocidos. “Voy a ser muy cruel: no nos ven. Esa es la realidad. Saben poco de nosotros. No es una Liga que se ven los partidos cada ocho días, no. Desde que vine a trabajar, me tenía que desvelar de dos a seis de la mañana para ver uno o dos juegos que difícilmente se ven. Es cierto que hoy a través del internet puedes ver muchísimo, pero no y Javier lo ha declarado muchísimas veces, no somos vistos. Si recuerdas cuando Javier sale de México es porque dirige el Mundial y había gente que lo conocía de cuando había estado en Osasuna que lo llama. A mí también cuando regreso hay dos opiniones importantes, una es Michel González y otra es Pablo Guede y la otra también muy importante Ángel Martín González que era el director deportivo de Osasuna que lo conocí bastante tiempo y ahora es director deportivo de Getafe. Son así las formas que hemos llegado, pero realmente no me apena decirlo, no ven mucho nuestro futbol”, concluyó Nacho Ambriz.