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GUADALAJARA, Jal., 10 de enero de 2021.- Pittsburgh tuvo un arranque de pesadilla y Cleveland aprovechó a la perfección las entregas del rival para sacar 28 puntos en el primer cuarto, con lo que se encaminaron a la victoria final por 48-37.
Tuvieron que pasar 26 años para que los Cafés volvieran a ganar un partido de postemporada en la NFL. Este domingo, consiguieron una sorpresiva victoria que dejó fuera a los Acereros y en la Ronda Divisional se enfrentarán a los Jefes de Kansas City.
Tras 18 años de ausencia, Cleveland volvió a los playoffs de la NFL. Y su inicio no pudo ser mejor, pues la defensiva aprovechó un grave error. En la primera jugada ofensiva de Pittsburgh, el centro Maurkice Pouncey envió de pésima forma el ovoide, por encima del mariscal de campo Ben Roethlisberger. El balón suelto se fue hasta la zona de anotación, donde Karl Joseph la recuperó para el primer touchdown de la noche. Con el punto extra de Cody Parkey, los Cafés ya estaban arriba 7-0 sin siquiera poner a su ataque en la cancha.
La segunda posesión de los Acereros también terminó mal. Big Ben fue interceptado por MJ Stewart y los Cafés quedaron en territorio enemigo. La ofensiva visitante explotó con un pase corto de Baker Mayfield para Jarvis Landry.
Con el ovoide en las manos, pisó el acelerador y logró 40 yardas de ganancia hasta cruzar las diagonales. Parkey hizo de nuevo efectivo el punto extra y Cleveland sorpresivamente se ponía 14-0 en el marcador.
La ofensiva de Acereros simplemente no conectaba y la defensiva tampoco era capaz de contener al adversario. El cuadro visitante estaba ya en la zona roja cuando Kareem Hunt recibió el balón detrás de la línea. Se abrió el hueco con los bloqueos y lo explotó a la perfección. Después, cuando chocó con la defensa, la fuerza de piernas lo impulsó hasta cruzar la línea prometida.
Con el punto extra de Cody Parkey, Cleveland se colocó arriba 21-0, apenas en el primer cuarto. Así se concretó una serie ofensiva de tres minutos y 65 yardas totales. Un arranque de ensueño para una franquicia que tenía 18 años sin jugar un partido de postemporada. En Heinz Field se estaba gestando una sorpresa mayúscula en los playoffs.
Pero la pesadilla del primer cuarto todavía no terminaba para Pittsburgh. Ben Roethlisberger lanzó un pase, manoteado por el receptor y estuvo muy atento Sheldrick Redwine para interceptar. Dejó a su equipo en la yarda 15 de los Acereros. El error fue bien capitalizado, pues Kareem Hunt, con un acarreo de ocho yardas, anotó su segundo touchdown del partido, Parkey pateó perfecto el punto extra. El marcador a esta altura nadie lo imaginaba: 28-0.
Ben Roethlisberger sufrió su tercera intercepción en la noche ya en el segundo cuarto. Su pase fue bloqueado en la línea por Vincent Taylor. El ovoide salió elevado, Porter Gustin se lanzó para atraparlo y darle la posición a Cleveland. Para fortuna de Pittsburgh, en esta ocasión los Cafés no pudieron convertir en puntos la cuarta entrega del partido por parte del equipo local.
Los Acereros por fin lograron romper el cero muy cerca del descanso. James Conner entró a las diagonales con una carrera de una yarda. Chris Boswell pateó el punto extra para que el marcador se moviera 28-7. El equipo local por fin pudo construir una buena serie ofensiva de 5:36 minutos, 13 jugadas y 89 yardas totales para acortar la distancia.
Pero el gusto de estar más cerca le duró muy poco al conjunto de casa. Antes de que concluyera el segundo cuarto, Baker Mayfield condujo una serie ofensiva de 64 yardas en apenas un minuto y 10 segundos, que concluyó con un pase de anotación para Austin Hooper, quien se desmarcó perfecto hacia el costado derecho. Con el punto extra de Cody Parkey, el marcador se puso 35-7. Pittsburgh necesitaba puntos a como diera lugar y en los últimos segundos de primera parte, logró mover el balón lo suficiente para intentar un gol de campo
Chris Boswell pateó perfecto, en un intento de 49 yardas que dejó la pizarra 35-10 para ir al descanso.
Ya en el tercer periodo, Ben Roethlisberger condujo una estupenda ofensiva de jugadas sin reunión, para evitar que se consumiera el reloj. El ataque concluyó con un pase de 15 yardas de Big Ben para Eric Ebron, que hizo una una gran atrapada en zona de anotación. Acereros apostó por buscar la conversión de dos puntos, pero falló. Así, el marcador se movió 35-16.
Más tarde, el ataque de Pittsburgh volvió a funcionar bajo el comando de Roethlisberger, quien llevó a su equipo hasta la yarda cinco. La defensiva de Cleveland aguantó en tres ocasiones. Pero en cuarta oportunidad, los Acereros se la jugaron. Big Ben lanzó un pase completo a la zona de anotación. Para JuJu Smith-Schuster. El marcador: 35-23 con el punto extra de Chris Boswell. Luego de estar abajo por 28 puntos, Pittsburgh estaba sólo a 12.
En el arranque del cuarto y último cuarto, Cleveland apagó la brava reacción de los locales. Jugada grande: Baker Mayfield aguantó, en el momento justo sacó un pase pantalla para Nick Chubb, quien libró el primer intento de tackleo y escapó para un total de 40 yardas hasta las diagonales. Con el punto extra, el 42-23 daba aparente tranquilidad a los Cafés.
Pero Pittsburgh se negaba a morir. La ofensiva de Big Ben consiguió un nuevo touchdown en una serie de 76 yardas, de apenas un minuto y 24 segundos. Roethlisberger concluyó el ataque con un preciso pase de anotación para Chase Claypool, de 29 yardas. En el intento de conversión, la defensiva hizo un gran trabajo y la pizarra se colocó 42-29.
Cleveland tuvo enseguida la oportunidad de finiquitar el encuentro. Tuvo primera y gol en la yarda seis, pero no pudo llegar a zona de anotación. Se tuvo que conformar con un gol de campo de Cody Parkey para el 45-29. Pero lo más importante de la serie ofensiva es que consumió 6:40 minutos en el reloj. Acereros se quedó a 16 puntos de distancia, lo que les daba cierta esperanza a menos de cinco minutos del final.
Pittsburgh necesitaba dos anotaciones con sus respectivas conversiones. Pero Ben Roethlisberger sufrió otra intercepción, la cuarta del partido (a sólo una de su récord personal). El mariscal de campo lanzó un pase que fue atrapado por Sione Takitaki, para darle el ovoide a los Cafés. Enseguida, Cody Parkey pateó un nuevo gol de campo de 37 yardas y con el 48-29 sentenció el partido.
Acereros no bajó los brazos, Big Ben lanzó otro pase de anotación para Chase Claypool (7 yardas) y la conversión se consiguió con un lanzamiento para James Conner. Así, se estableció el 48-37 final. Por Pittsburgh, Roethlisberger tuvo un partido de 47 pases completos, para 501 yardas y cuatro touchdowns, pero sufrió cuatro intercepciones que al final pesaron. Por Cleveland, Baker Mayfield firmó un encuentro de 21 pases completos, para 263 yardas, tres anotaciones y sin intercepción.