Chivas disputará primer amistoso de pretemporada frente a Zacatecas
GUADALAJARA, Jal., 20 de diciembre de 2024.- El caso de Jesús Gilberto Orozco Chiquete empieza a complicarse mucho más de lo que estaba previsto. El zaguero central de Chivas tenía proyectado salir del club para irse al Cruz Azul mediante el pago de la cláusula de rescisión de contrato. Sin embargo, hasta ahora esa operación no se ha logrado concretado. Lo peor: se ha negado a entrenar con el Guadalajara, todavía dueño de sus derechos federativos.
Este viernes, se pudo saber a través de fuentes yes cercanas a la directiva del Rebaño Sagrado, que el futbolista ha sido multado, por no presentarse a trabajar en la pretemporada del equipo.
Aparentemente, el zaguero central ya tiene la mente puesta en presentarse con La Máquina el próximo 2 de enero, para comenzar con la pretemporada, pero mientras no se deposite el pago de su cláusula, su obligación es trabajar con Chivas.
Al arranque de la pretemporada rojiblanca, Orozco Chiquete se ausentó del equipo, respetando un cuadro de chikungunya.
Pero según se pudo investigar, el futbolista ya dio negativo a dicha enfermedad en un par de estudios. Así, la directiva le informó que debía unirse al equipo para comenzar a trabajar de cara a la próxima campaña.
El jugador desobedeció la indicación y no se ha presentado. Eso ya provocó una multa y un disgusto mayúsculo.
La relación entre el defensor y la directiva de Chivas está ahora rota. El futbolista ya no quiere seguir en el Rebaño Sagrado o al menos esa indican sus actos. La ausencia en los entrenamientos puede traer graves consecuencias. Incluso, el incumplimiento de contrato es motivo de rescisión del mismo. Pero eso implicaría dejarlo libre para que se vaya a cualquier equipo sin pagar la cláusula. Es decir, para el Guadalajara no es una opción “correrlo”.
El traspaso de Orozco Chiquete a Cruz Azul se frenó cuando la directiva celeste pidió al futbolista negociar con su club para que el pago se hiciera en dos exhibiciones. Chivas no aceptó. Exige que los 11 millones de dólares se pagan de contado. No hay más. Eso o nada. Pero ahora, mientras se define el futuro de dicha operación, el deber del jugador es acudir a entrenar, algo que se ha negado a hacer en los últimos días. El caso se está convirtiendo en un problema y en los próximos días se definirá el rumbo que seguirá.