GUADALAJARA, Jal., 28 de julio de 2021.- La dupla integrada por Alejandra Orozco y Gabriela Agúndez, le entregaron a México su segunda medalla en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, cosechando el bronce, la cual llegó con dramatismo, después de que las atletas de Japón no pudieron alcanzarlas en los clavados sincronizados de 10 metros.

Ya con la presea en su poder, Alejandra Orozco intentó describir sus sentimientos por esta obtención y se mostró más que contenta porque el trabajo les rinde frutos en una justa de esta índole.

“Creo que es difícil poner en palabras tantas emociones y momentos, antes, durante y después de la competencia, pero creo que lo más importante es que estamos felices, satisfechas de nuestro trabajo, de este momento que comenzó como un sueño, después se convirtió en una meta, en un objetivo y ahora es un logro”, manifestó la tapatía.

El tener esta obtención es especial, dadas todas las circunstancias que se vivieron antes de los Juegos por la pandemia de Covid 19 y en la misma plataforma, pero con todo y ello, ambas atletas tenían bien claros sus objetivos.

“Aún con todas las situaciones que se vivieron a nivel personal, profesional, mundial, el poder sumar, adaptarnos, sumar, hacer un cambio. Gaby y yo tuvimos muy presentes que queríamos llegar a este día hasta el final, luchando hasta el final y demostrar que tarde o temprano hay un fruto, tarde o temprano hay una experiencia y un aprendizaje, pero siempre un momento de crecimiento y creo eso fue con lo que nos despertamos ayer”, estableció.

Orozco Loza reveló que, tal como se vio en la imagen de televisión, no pudieron ocultar la emoción cuando vieron que Japón no pudo superarles en su rutina.

“No pudimos ocultar nuestras emociones a la hora de competir, estábamos muy enfocadas, muy concentradas clavado por clavado, pensando en lo que nos correspondía hacer y al final ver que ya estábamos dentro, que todo tiene su fruto…Son muchas emociones encontradas”, indicó.

La doble medallista olímpica manifestó que las conquistas que tiene en su haber las ha disfrutado de manera diferentes, siendo esta la que llega en una etapa de madurez deportiva y al hablar de Gaby Agúndez, no reparó en elogios, calificándola como una atleta que ya pasa a la historia de este deporte.

“En mi caso es mi segunda medalla, pero las he vivido muy distintas. Lo vi todo, lo dimensioné todo. Era una Ale más madura viviendo el momento y feliz de poder hacerlo al lado de Gaby. Ha ganado todo, es una niña que tiene muchísima trayectoria, muchísima proyección y esto es de aquí para adelante. Pasa a la historia”. 

Por su parte la joven Gabriel Agúndez se mostró contenta y orgullosa por la obtención de medalla en sus primeros Juegos Olímpicos, lo cual para ella es un sueño que tenía desde el proceso a esta justa veraniega y que hoy en día se materializa.

“Estos muy feliz con este resultado. Mis primeros Juegos Olímpicos, mi primera medalla olímpica. Es un sueño hecho realidad, un sueño por el cual he trabajado mucho y en compañía con Ale (Orozco) e Iván (Bautista), hemos hecho una gran mancuerna, un muy buen equipo y el resultado se vio reflejado, todo el trabajo se vio reflejado en esta competencia y muy feliz”, externó en entrevista.

La atleta agradeció en especial al profesor Yunieski Sánchez, quien falleció el pasado 25 de mayo de 2020. 

“Muy agradecida con todas las personas que me han apoyado, que han creído en nosotros y que estuvieron viéndonos competir y que nos echaron muchas porras. Le mando un abrazo al profe Yunieski que seguro celebró esta medalla con nosotros desde el cielo”, finalizó.