Para Oakland, jugar un partido de casa contra los Texanos en la serie internacional sería una obvia elección, dijeron los funcionarios de la liga familiarizados con las negociaciones, citados por el rotativo.
Los Raiders tenían la esperanza de mudarse a Los Ángeles, pero se quedaron fuera, y todavía tienen que firmar un nuevo contrato de arrendamiento en Oakland, su actual sede.
El dueño de los Texanos, Bob McNair, y el presidente, Jamey Rootes, han dicho a la liga que les gustaría que su equipo participara en la serie internacional, preferentemente en la Ciudad de México debido a que tienen una base de seguidores cada vez mayor en ese país.
McNair ha insistido en que no va a renunciar a un partido en casa en el estadio NRG de Houston, pero le gustaría jugar un partido fuera de casa en la Ciudad de México y el hacerlo contra Oakland es un elección natural debido a sus circunstancias actuales.
Rootes, el presidente de los Texanos, formó parte de un grupo de líderes de negocios de Houston que visitaron la Ciudad de México durante la pasada temporada, y abordó el tema de jugar allí después del viaje.
“Siempre hemos expresado que tenemos un interés en participar internacionalmente como equipo (y), hemos dejado claro que estábamos más interesados en hacerlo en México”, dijo Rootes después de la visita. “Es una gran oportunidad para los equipos y la liga”, indico.
“La Ciudad de México es una elección lógica para un equipo como los Texanos. Seríamos un gran embajador de la liga”.
En 2005, la NFL celebró un partido de temporada regular en el Estadio Azteca, en el que Arizona derroto a San Francisco ante una multitud de 103 mil 467 aficionados.
Sin embargo, la mayor multitud congregada en México para ver un partido de la NFL fue en la pretemporada de 1994, cuando los entonces Petroleros de Houston vencieron a los Vaqueros de Dallas ante 112 mil personas.
Quadratín Deportes