GUADALAJARA, JAL., 13 de junio 2019.- “Una explicación por el uso de diseños y bordados de pueblos originarios” solicitó Alejandra Frausto, secretaria de Cultura del Gobierno de México, en su misiva dirigida a Carolina Herrera y Wes Gordon (titular actual de la firma).

La funcionaria se refirió en una parte de la carta a los tenangos hidalguenses, ya que “ese bordado proviene de la comunidad de Tenango de Doria (Hidalgo); en estos bordados se encuentra la historia misma de la comunidad y cada elemento tiene un significado personal, familiar y comunitario”. Citó la apropiación de elementos oaxaqueños y del tradicional sarape de saltillo.

En respuesta, Wes Gordon, también director creativo de Carolina Herrera, en un comunicado de prensa, expuso que las prendas de la colección Resort 2020 “rinden homenaje a la riqueza de la cultura mexicana”, por lo que en su nota reconoce el alto valor de la artesanía mexicana reiterando su respeto y admiración por ésta.

“La nueva colección crucero 2020 de Carolina Herrera se inspira en unas alegres y coloridas vacaciones latinas, el amanecer de Tulum, las olas en José Ignacio, el bailar en Buenos Aires o los colores de Cartagena”, reitera.

Sin sanciones a corto plazo por apropiación cultural A la fecha no existen procesos de infracción en materia de derechos de autor que eviten prácticas ilegales e inequitativas por parte de empresas nacionales e internacionales respecto del uso de las creaciones intelectuales de los pueblos originarios mexicanos.

Lo anterior se detalla en la queja presentada ante el titular del órgano interno de Control de la Secretaría de Cultura, Víctor Romero Maldonado por Carlos Arturo Martínez Negrete, defensor de los derechos culturales de pueblos originarios y promotor de la protección de sus trabajos.

En el documento solicita la intervención de Romero Maldonado, dependiente de la Secretaría de la Función Pública, intervenga para sancionar a Cuauhtemoc Hugo Contreras Lamadrid, Director del Instituto Nacional del Derecho de Autor (Indautor) por omitir el cumplimiento de sus atribuciones, facultades y obligaciones al no actuar en contra de unas 20 marcas nacionales e internacionales que han utilizado imágenes y valores identitarios de los pueblos originarios.

Dando seguimiento a las quejas ya presentadas ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos en las que se denunció plagio por parte de las empresas Mango, Nestlé y la influencer Yuya, la CNDH generó la recomendación general 35, en que conmina a autoridades legislativas, judiciales y administrativas a velar por la salvaguarda de las creaciones intelectuales de los pueblos originarios.

No obstante, México apenas trabaja en una ley de Salvaguarda de los Conocimientos,

Cultura e Identidad de los Pueblos Indígenas y Afromexicanos, iniciativa propuesta por la senadora Susana Harp y que daría espacio a la protección de la cultura indígena y sus expresiones artísticas, pero hasta el momento no cuenta con sanciones a quienes toman las mismas con fines de lucro sin dar crédito a sus creadores.

Asimismo, no existe aún una sanción para lo que se denomina “apropiación cultural”, un concepto recientemente forjado en Estados Unidos de América y que se refiere al acto de utilizar, copiar o tomar cosas de una cultura que no es la nuestra.

El concepto, utilizado y viralizado para condenar este tipo de actividades, cae en contradicciones y dificultades para su uso al tomar en cuenta que por “apropiación cultural” puede tomarse desde la preparación de sushi al “estilo mexicano”, vestir prendas con banderas de otro país, adoptar expresiones en otro lenguaje, peinarse o maquillarse con colores o estilos relacionados con otra cultura o prácticas tan sencillas como festejar Halloween desconociendo sus orígenes celtas o vestir los atuendos típicos mexicanos de un estado que no es el nuestro en las fiestas patrias.

Cultura Hidalgo fija posición sobre apropiación cultural de tenangos “Es importante encausar mecanismos que promuevan el valor del arte popular de las bordadoras e igualmente penalizar a quien sin escrúpulos se apropia de la cultura colectiva sin tener permiso de los grupos y comunidades portadoras de tradición”, expresó José Olaf Hernández Sánchez, titular de Cultura en Hidalgo, al respecto de la acusación por parte de la Secretaría de Cultura federal contra la firma Carolina Herrera.

De esta forma, la Secretaría de Cultura en el estado se sumó a las opiniones que refieren que este tipo de actos lucran con el arte popular en el mercado de la moda, por lo que urgió a que se den las condiciones para que progrese la iniciativa para proteger el patrimonio cultural inmaterial que por generaciones ha sido heredada por los pueblos originarios preservando las técnicas y diseños para su elaboración.

Apoyó que se penalice “a quien sin escrúpulos se apropia de la cultura colectiva sin tener permiso de los grupos y las comunidades portadoras de la tradición”, al tiempo que reiteró su solidaridad con las bordadoras de San Nicolás, municipio de Tenango de Doria comprometiéndose a que “desde Cultura Hidalgo seguiremos buscando los mecanismos necesarios al respecto”.