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CIUDAD DE MÉXICO, 19 de septiembre de 2018.- La Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) pidió proteger los derechos humanos durante emergencias humanitarias y en el proceso de reconstrucción, el día en que se cumple un año del trágico terremoto del 19 de septiembre de 2017 en México.
«Asimismo, la ONU-DH llama a las autoridades mexicanas a mantener como temas prioritarios la atención a las poblaciones afectadas y la preparación frente a los riesgos naturales», agregó el organismo en un comunicado referente a los dos terremotos que en septiembre de 2017 sacudieron el centro y sur del país dejando 471 muertos y cuantiosos daños materiales.
A partir de los mencionados terremotos, la ONU-DH trabajó en coordinación con las distintas agencias de las Naciones Unidas en México para contribuir a la atención integral de las personas damnificadas, en varios estados del país.
«Respecto a la fase de emergencia, la ONU-DH reconoce la gran muestra de solidaridad de la población y los esfuerzos desplegados por las autoridades. Al mismo tiempo, los acontecimientos también mostraron la necesidad de fortalecer la dimensión de derechos humanos en la respuesta a los desastres», agregó.
Sobre todo en términos de protección a las víctimas e información a las personas directamente afectadas, familiares y público en general, indicó.
«La dimensión de género también surgió como prioridad para futuros esfuerzos», señaló el representante de la ONU-DH en México, Jan Jarab, quien destacó que las autoridades tienen la obligación de garantizar los servicios básicos a las personas afectadas.
En relación con la fase de reconstrucción, la ONU-DH enfatizó la necesidad de censos completos, transparencia en el uso de recursos y atención a las necesidades e impactos de corto, mediano y largo plazo.
«Es fundamental garantizar que no exista ningún tipo de discriminación en la atención», remarcó Jarab, quien animó a la participación «activa» de las personas beneficiarias de políticas y programas de reconstrucción.
Asimismo, los esfuerzos de reconstrucción deben ir acompañados de acciones de prevención.
Finalmente, la ONU-DH reiteró que los daños que ocurrieron en septiembre de 2017 aún no están superados porque un número considerable de familias sigue en una compleja situación.
En este contexto, llamó a las autoridades a «redoblar los esfuerzos para garantizar la protección de los derechos humanos de todas y todos los afectados», concluyó el texto.