Eran las 10:00 de la noche cuando una de las bandas más importante de la década de los 90 dejaba sonar los acordes de temas como “subhuman”, “Paranoid”, “stupid Girl”, “Blood for poppies”, sin duda parte de los temas que han sido éxito y que lograron prender a los 9500 asistentes durante las dos horas de concierto.
Otro de los momentos importantes durante la velada son las conversaciones que tiene la agrupación con la gente y así como lo ha venido diciendo en sus conciertos en el País la vocalista Shirley Manson pidió una disculpa al público mexicano por las declaraciones xenofóbicas del candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump.
“Siento asco en mi estomago que alguien como Trump represente a los Estados Unidos y que hable de manera tan mal de la fantástica y trabajadora gente mexicana; toda la banda se siente terrible por esos episodios”. Amor, tolerancia y luz es lo que se debe compartir y dedica la canción “Sex is not The enemy”, a los mexicanos y todos los que están en contra de eso.
La vocalista vestía con unas medias caladas negras, un vestido blanco de flecos con rayas horizontales en tonos plateados y su icónica cabellera de color rosado, siempre ha destacado por su buen gusto en la moda y su rebeldía inconfundible.
También mencionó momentos de los inicios de su carrera en México; estábamos recordando en camerinos que hace 21 años tocamos por primera vez en el Teatro Metropolitan, en nuestro primer concierto profesional desde ahí el gran cariño hacia México y sus fans. También agradeció por toda el apoyo y la locura de la ciudad.
“Cherry Lips”, “Only Happy”, “Vow”, “Only Happy”, temas que se escucharon y marcaban el final de un gran show, sin embargo todavía faltaba más por escuchar y hubo un regreso de la banda estadounidense para despedirse con “Sometimes”, “Empty” y “Beloved freak” y Mandson y con la frase: Muchas Gracias México.