En el desarrollo del panel “Costos Económicos y Sociales de la corrupción. ¿Puede el acceso a la información reducirlos?”, que moderó el periodista Salvador Camarena, los expositores manifestaron que la transparencia y la información útil estimulan la inversión y la economía, contribuyendo a reducir la pobreza y desigualdad.
De acuerdo con un comunicado, Oscar Guerra Ford, comisionado del INAI, aseguró que el acceso a la información permite al ciudadano tener armas para evidenciar la corrupción, y que con la entrada en vigor de la Ley General de Transparencia se podrá denunciar y sancionar a los sujetos obligados que no publiquen información ineludible conforme al marco normativo.
Considero indispensable articular bien las reformas estructurales en transparencia y anticorrupción, porque “son dos caras de la misma moneda y si vamos a seguir con la impunidad, vamos a ser el país más transparente pero más descarado”.
El comisionado Guerra Ford destacó la utilidad del acceso a la información que ha permitido saber de créditos de Procampo a exportadores agropecuarios o el uso de un helicóptero por parte de un funcionario público, así como aplicaciones como la que está desarrollando el INAI para que se conozcan viajes claros de sus funcionarios y las adquisiciones.
Por otra parte, Luis de la Calle, director general y fundador de la empresa consultora en asuntos públicos “De la Calle Madrazo Mancera”, manifestó que el costo de la corrupción, la extorsión y la ausencia del Estado de derecho es que la economía crezca menos.
Propuso que se premie la transparencia de las empresas que hagan pública toda su información y que por lo tanto no tengan que ser requeridas en ningún dato por el gobierno. “Vamos a tratar mejor a los que sean absolutamente transparentes para disminuir la corrupción”, agregó.
En su participación, Mario Palma Rojo, vicepresidente de Gobierno, seguridad Pública e Impartición de Justicia del INEGI, reconoció que hace falta información en el tema de la corrupción, sobre todo a nivel municipal, para poder combatirla con mayor eficiencia.
Dijo que la cifra negra de la corrupción es de 99 por ciento. “La corrupción no es genética, puede ser cultural pero tiene remedio y se puede componer, pero se necesita mucha información”, añadió.
Alejandro Ríos Rippa, presidente del Comité Anticorrupción de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), dijo que el sector empresarial ve con preocupación la corrupción porque genera impunidad, paraliza el Estado de derecho y reduce la confianza en los inversionistas.
Señaló que los inversionistas extranjeros analizan siempre donde pueden colocar capitales, y reconoció que existen empresarios “que buscan países donde hay corrupción en las licitaciones, porque la mordida y el moche ya está en su presupuesto”.
En su intervención, Eduardo Bohórquez, director ejecutivo de Transparencia Mexicana, dijo que la agenda de la transparencia y el acceso a la información no está agotada con la reforma estructural y se le tiene que dar propósito y sentido, para que sea una herramienta contra la corrupción e impunidad.
“La información es crucial y es uno de los grandes temas de la agenda nacional. Debemos darle sentido a la información, porque la información per se no se conecta con otras agendas y no la hemos conectado con la reducción de la pobreza, la desigualdad y el fomento a la pequeña y mediana empresas”, subrayó.
