Gestión del Relleno Sanitario de Xalapa, el sucio negocio de Veolia

GUADALAJARA, JAL., 3 de julio de 2019.- En el año 1853, por decreto real de Napoleón III, se creó en Francia una empresa de servicios hídricos que en 2005 adopta el nombre de Veolia, con cuatro especialidades: agua, servicios ambientales, energía y transporte.

En su sitio web para México, la empresa mundial presume su presencia en todos los continentes, destacando su capacidad para desarrollar soluciones de economía circular en la gestión de agua, residuos sólidos y energía “para mejorar la eficiencia de organismos públicos e industria privada”.

En su reporte de 2017, la empresa asegura haber facturado 25 mil 125 millones de euros y contar con 168 mil 800 colaboradores en cinco continentes.

Pero como la gran empresa que presume ser, ha enfrentado también grandes problemas y escándalos, principalmente en dos de sus especialidades: tratamiento del agua y manejo de residuos sólidos.

La actual administración municipal de Xalapa heredó con Veolia una relación que tenía desde hace años con filiales de la empresa, específicamente con ProActiva, para el manejo del Relleno Sanitario ubicado en la congregación de El Tronconal.

En una charla con el alcalde Pedro Hipólito Rodríguez Herrero para profundizar sobre el conflicto legal que enfrenta el ayuntamiento de Xalapa con la multinacional, enumeró algunos de los señalamientos que ha recibido Veolia, por ejemplo en Morelia y Chiapas, dentro del país, pero también en Estados Unidos, Brasil, Venezuela, Chile, Inglaterra, Francia, entre otros.

“No es un conflicto que sólo tenga con Xalapa, sino con muchas ciudades del país y del mundo, porque la empresa Veolia tiene la característica de generar contratos abusivos que van en detrimento de las finanzas municipales y que generan impactos ambientales considerables…

es cuestionada por su desempeño, abusos, y por su manera sucia de gestionar un negocio sucio”.

A decir del alcalde, Veolia impone contratos de muy larga duración, de 15, 20 y hasta 30 años, que son tremendamente abusivos, pues cobran un precio muy alto por un servicio que en realidad no cuesta esa cantidad. Incluso señaló que en Francia y Brasil, el Banco Mundial ha inhabilitado las subsidiarias de Veolia Water Technologies.

A pesar de eso, en el caso particular de Xalapa no ha cumplido con cláusulas básicas del contrato.

“Manejar los residuos sólidos podría ser un negocio limpio, pero ellos (Veolia) lo manejan como un negocio sucio, paga muy bajos salarios a sus trabajadores, los coloca en situaciones de insalubridad, genera impactos ambientales nefastos en la comunidad, porque está contaminando los cuerpos de agua, está transgrediendo la normatividad ambiental, no cuida las instalaciones del relleno sanitario, y el apartarse de la legalidad ambiental no sólo es un delito, sino que genera un problema de salud pública, porque en el caso de Xalapa no cumple con las normas de cuidar que haya una geomembrana y que los lixiviados sean tratados de una manera adecuada, y eso impacta en el entorno”.

Veolia incumple con cláusulas del contrato y contamina el entorno. Inicia batalla legal El ayuntamiento de Xalapa inició relaciones con la empresa Mexicana del Medio Ambiente, con quien firmó un contrato para el manejo del relleno sanitario.

Posteriormente, en 2003, se hizo un convenio modificatorio, sin cumplir con las formalidades de ley, en el que se estableció que trabajarían a partir de ese momento por un periodo de 15 años, cuya fecha de vencimiento era abril de 2018.

En diciembre de 2017, el ex presidente municipal y ex líder estatal del convaleciente PRI, Américo Zúñiga Martínez, a días de concluir su gestión, decidió firmar un convenio de prórroga por otros 15 años con ProActiva, una filial de Veolia.

“Examinamos la historia de los contratos y advertimos que esta prórroga era concederle a la empresa todos los beneficios y quitarle al ayuntamiento la posibilidad de defender el patrimonio de los xalapeños”, afirmó Hipólito Rodríguez, quien inició la batalla legal contra el abusivo contrato desde su posición como alcalde electo mediante un amparo que le fue rechazado.

Entre los señalamientos que hace Rodríguez Herrero a Veolia está una clausula en el contrato que establece que a pesar de que el ayuntamiento de Xalapa pudiera disminuir la cantidad de toneladas basura que entrega al día, la empresa tendrá el pago garantizado de 350 toneladas diarias.

“Esto va contra los principios básicos de esta administración, que es reducir la generación de residuos sólidos, buscando que todo lo que es materia orgánica sea aprovechado como energía y como composta…

Si nosotros reducimos la cantidad de residuos que entregamos al Relleno Sanitario no tenemos por qué pagar una cuota fija, es abusivo”.

Otra de las cláusulas indica que la empresa Veolia tiene que reparar el camino de acceso al Relleno Sanitario, y tiene que brindar educación ambiental.

Además, se establece que Veolia debe cuidar que haya una geomembrana apropiada en el manejo de los residuos sólidos para que no haya lixiviados, lo cual, desde el 2011, no ha cumplido, afirma el alcalde.

“Vista la infracción a las cláusulas del convenio es que determinamos no trabajar con Veolia y en abril de 2018, cuando debía entrar en vigor la prórroga que de forma abusiva celebró el anterior presidente municipal, decidimos en sesión de cabildo poner fin a la concesión que se tuvo con la empresa”.

“Fue un acto legal, institucional, a la luz pública y de manera democrática se decidió poner fin a la concesión. Es una facultad de la ley orgánica del ayuntamiento”.

Recordó que en octubre de 2018 la Secretaría de Medio Ambiente (Sedema) clausuró el Relleno Sanitario porque Veolia no cumplía con las reglas ambientales, se le permitió abrir a pocos días con la promesa de que iba a atender las observaciones, lo cual hizo de manera parcial.

En 2019, nuevamente la autoridad ambiental hizo observaciones críticas a Veolia por no acatar normatividad y seguir contaminando; “había pruebas de que estaba contaminando el arroyo San Juan”.

“También la Procuraduría Ambiental reconoció que Veolia contaminaba, pero no clausuraron, pues la situación de salud pública era muy delicada, por lo que aplazaron la medida”.

Vecinos de El Tronconal han dado testimonios de que la gente sufre enfermedades de la piel porque el agua está contaminada, se quejan de los malos olores porque la empresa no cubre los residuos con la materia necesaria para impedir el mal olor.

El edil xalapeño reconoció que desde el inicio de su administración no se le ha pagado ni un centavo a la empresa, por lo que para presionar al ayuntamiento, Veolia cerró el Relleno Sanitario en marzo, “eso es inaceptable, no puede una empresa privada suspender un servicio público, y es con base en esa situación que nosotros retomamos la operación”.

Para ello, se notificó a las instancias correspondientes que suspender este servicio del manejo de residuos sólidos es poner en riesgo la salud de los habitantes de Xalapa y Emiliano Zapata, que también depositan sus derechos en el sitio.

Es así que desde el 1 de abril el ayuntamiento de Xalapa gestiona el Relleno Sanitario; “reparar el daño de la empresa es muy costoso y hemos invertido mucho dinero”.

Veolia cobra al municipio dos millones 200 mil pesos mensuales por el manejo de la basura, en tanto que al ayuntamiento le cuesta un millón 800 mil pesos.

“Lo que hace este gobierno municipal es justicia ambiental y justicia administrativa, estamos tratando de crear un entorno sano, apegado a la ley, que cuide el medio ambiente, que cuide la salud pública”.

Rodríguez asegura que en la gestión municipal, el ayuntamiento xalapeño está siendo muy cuidadoso de la legalidad, “nos han estado observando cada semana la Procuraduría del Medio Ambiente, la Sedema, para que haya evidencia de que estamos cumpliendo con la norma y que se documente el estado en que dejó la empresa el Relleno Sanitario”.