Con 96 por ciento de las urnas contabilizadas, la ex primera dama aventajaba a su rival socialista Bernie Sanders con 56.0 por ciento de los votos contra el 43.1 por ciento, una ventaja insuperable.
Con sus triunfos en Nueva Jersey, Nuevo México, Dakota del Sur y California, la ex primera dama se convirtió virtualmente en la primera mujer en la historia en ganar la candidatura presidencial de uno de los dos mayores partidos políticos de Estados Unidos.
Pero Sanders, quien ganó las elecciones primarias en Dakota del Norte y las asambleas electorales de Montana, no dio sin embargo indicios de conceder la derrota y sugirió que se mantendrá hasta la convención partidista de julio en Filadelfia.
Anoche el presidente Barack Obama felicitó a Clinton por la hazaña de haber ganado la nominación presidencial del Partido Demócrata para las elecciones del 8 de noviembre.
Obama destacó que la campaña de la ex primera dama de Estados Unidos inspiró a millones de estadunidenses y es una continuación de su lucha por la Casa Blanca.
Poco antes la propia Clinton se proclamó como la primera mujer en ganar la nominación presidencial de un partido político mayor de Estados Unidos.
Clinton, quien perdió la nominación presidencial demócrata en 2008, consideró su victoria como un momento histórico para las mujeres al haber logrado obtener la mayoría de los delegados necesarios. Aunque no dio cifras, el número reglamentario es dos mil 383 delegados.
A petición de Sanders, el presidente Obama lo recibirá en la Casa Blanca este jueves para proseguir la conversación que iniciaron sobre los retos de Estados Unidos.